Caso práctico
Luis y Elena han decidido abrir su propia empresa de informática, ya han avanzado mucho en el estudio de su proyecto, cada día que pasa su sueño parece más cercano.
Ha llegado el momento de analizar si el negocio planteado es viable desde el punto de vista económico-financiero.
Luis está algo perdido en temas económicos, "los números me dan alergia" decía cuando no entendía una explicación en clase de Matemáticas. Ahora dice lo mismo cuando oye el precio del alquiler del local, cuando calcula los intereses que hay que pagar al banco por el préstamo, cuando ve lo rápido que se acaba el dinero, ¡aun comprando sólo lo imprescindible!
Afortunadamente, Elena ha estudiado un curso de Contabilidad, pues en el negocio de servicios informáticos en el que ha estado trabajando durante cinco años, además de trabajar como comercial, se encargaba de los asuntos económicos. Está dispuesta a enseñar a Luis los aspectos básicos de la Contabilidad y convencerle de la importancia de elaborar un Plan Económico Financiero de calidad, que aumente las posibilidades de obtener una buena financiación y de que su negocio perdure a largo plazo.
Elena advierte a Luis que los primeros meses o años de una nueva empresa suelen ser duros. Por este motivo se debe gestionar con previsión de negocio.
–Y, eso, ¿cómo se consigue? –pregunta Luis.
–Gracias a la ayuda de la Contabilidad" –responde Elena–. Te lo explicaré poco a poco.
También hay organismos que asesoran gratuitamente a las personas emprendedoras sobre estos temas, como la Asociación de Jóvenes Empresarios, los Viveros de Empresa y los PAE.