¿Qué operaciones previas al mecanizado de materiales debes tener en cuenta?, básicamente una vez determinado el material a mecanizar, debes de tener en cuenta dos operaciones:

• Seleccionar las caras y cantos idóneos de apoyo para el mecanizado de aserrado y labrado, exige que conozcas las técnicas de manejo de dichas máquinas, a modo de ejemplo, para cepillar las caras y cantos de las piezas debes de elegir la adecuada para realizar con mayor rapidez la planitud, cuando veas las operaciones de manejo de la cepilladora, comprenderás muy bien lo que acabamos de decir.

• Marcar y trazar las piezas para su mecanizado. Normalmente la operación previa más importante en el mecanizado para el ensamblado de elementos de prototipos, es sin lugar a dudas el marcado y trazado de las piezas, y requiere por ello que comprendas las técnicas de marcado y trazado de elementos que forman el prototipo. No te vamos a describir las operaciones de marcado y trazado en este momento, ya que se especifican más adelante en otro apartado de la unidad.

Recuerda que, hacíamos referencia a los, la relación de instrumentos de medida y trazado que utilizamos para las operaciones de marcado y trazado de piezas, previas al mecanizado, se describe a continuación:

• Falsa escuadra, consta de talón y hoja, la hoja se puede deslizar alrededor del tornillo de fijación de palomilla, con la particularidad de poder fijar dicha hoja al talón, formando el ángulo deseado.
• Escuadra de talón, te permite doble o triple función:
  • Marcar líneas perpendiculares con respecto al borde de referencia en el que hemos apoyado el talón.
  • Comprobar la precisión de los ángulos rectos ángulos de 90 grados (90º).
  • Marcar líneas a 45º con respecto al borde de referencia en el que se apoya la parte superior del talón acabado en ángulo de 45º, tienes que saber que algunas escuadras de talón no te ofrecen ésta posibilidad, ya que el remate superior del talón va enrasado a línea con la hoja metálica.
• Transportador de ángulos de luneta, como puedes ver en la imagen, consta de un semicírculo marcado grado a grado los 180º, ángulo llano, la regla se fija a la luneta mediante un tornillo de palomilla una vez seleccionado el ángulo.
• Flexómetro, consta de una caja que recoge la cinta de acero milimetrada, existen de diferentes longitudes de cinta, el más utilizado en las tareas de prototipos es el de 3 m.
• Regla milimetrada, es una regla de acero o aluminio, milimetrada en toda su longitud que te permite determinar mediciones con una mayor precisión que el flexómetro.
• Compás de puntas, consta de dos puntas simétricas que te permite determinar centros de orificios trasladando la medida fijada de punta a punta, lógicamente marca arcos y circunferencias.
• Lápiz, normalmente utilizarás los llamados de dibujo, el clásico lápiz de carpintero lo emplearás para marcar longitudes de corte no muy precisas en tablones y tablas.
• Calibre, está formado por una regla graduada con un pico o labio formando escuadra en un extremo, en dicha regla se desliza otra también graduada llamada nonio, con escalas graduadas de 0,1 milímetros y 0.05 mm.
• Gramil de doble vara, clásico gramil de madera de doble vara para tomar dos medidas, lo utilizaras para trazar líneas paralelas al borde de referencia.
• Gramil de dos puntas, la particularidad del gramil está en la corredera generalmente de latón, que te permite determinar dos líneas paralelas en una operación de trazado.

A continuación vas ver las operaciones de medición. marcado y trazado, con estas operaciones tienes que conseguir, de cualquier elemento que forma parte del prototipo, tres características:

• Su medida.
• Su identificación con las marcas correspondientes.
• Su trazado para el mecanizado.

¿Cómo consigues medir un elemento o pieza?, recuerda que medir es comparar una cantidad con su respectiva unidad, con el fin de saber cuántas veces la primera contiene la segunda, como sabes, en España utilizamos el Sistema Métrico Decimal, realizando las mediciones en múltiplos y submúltiplos del metro de diez en diez unidades, normalmente determinarás las mediciones dependiendo del tamaño de las piezas, de las partes de las piezas o del mecanizado a realizar, así es muy común hablar de metros, centímetros y milímetros, o incluso, para determinados elementos especificamos las medidas de su longitud en metros, el ancho en centímetros y el grueso en milímetros, en mecanizados muy exigentes en precisión, utilizarás la décima parte del milímetro para definir su medición.

La identificación de las piezas que forman parte de un conjunto, lo lograrás por medio de las llamadas marcas convencionales, ¿qué son las marcas convencionales y qué utilidad tienen?:

• Son un conjunto de signos o marcas que trazas en las piezas, los signos no están normalizados por lo que hay variedad de ellos, los más comunes son el perfil de la montaña para las piezas horizontales y la cruz de San Andrés para las verticales. Los signos en forma de montaña se marcan en el centro de las caras buenas de las piezas, marcando el pico en la pieza que va situada en la parte superior del prototipo o conjunto de piezas y la falda se marca en la pieza inferior, las piezas horizontales intermedias van con el signo coincidente entre el pico y la falda. Los signos, en las piezas verticales, van situados en la parte superior de dichas piezas, siendo muy común utilizar como signo en el marcado de éstas piezas una circunferencia o una línea cruzada de derecha a izquierda, en la imagen puedes observar las marcas en las piezas según su posición horizontal o vertical.
• Sirven para identificar las piezas según su disposición en el conjunto del que forman parte.
• Los signos se marcan en las caras buenas de las piezas, caras que consideramos como principales y que van en la parte del prototipo o conjunto de piezas que más se ve, caras que vamos a tomar de referencia en operaciones de trazado y mecanizado.

Una vez midas las piezas e las identifiques con las marcas convencionales correspondientes, te faltará realizar el trazado de referencia para el mecanizado, respondiéndose a las características del mecanizado que tengas que realizar en las piezas.

¿Qué trazado realizarás en las piezas?, todos los necesarios para poder mecanizar las piezas con precisión y sin posibilidad de error. Para ello debes tener en consideración los siguientes consejos:

• No trazar más líneas de las necesarias, pueden confundirte.
• Traza en primer lugar las líneas en las caras buenas de las piezas, para pasar a continuación al canto las necesarias de referencia para el mecanizado.
• Las líneas que trazamos de limitación de longitud de piezas, márcalas con una cruz de San Andrés encima de la línea.
• Traza todas las líneas, signos y marcas, que te puedan facilitar el trabajo.
• Utiliza los útiles adecuados al trazado a efectuar.
• No improvises en el marcado, realiza todas las operaciones de trazado previas al comienzo del mecanizado.
• Apoya correctamente los útiles de medida en las superficies de referencia.

Como viste en la primera unidad, para hacernos una idea visual en tres dimensiones del prototipo realizamos habitualmente una maqueta, la realización de dicha maqueta hay que considerarla como una parte fundamental del proceso de diseño y fabricación de prototipos.

Las maquetas, como sabes, no las realizamos para determinar aspectos de materiales, resistencia de uniones y ensambles, acabados superficiales, entre otros, la idea fundamental de la maqueta es comprobar las formas, la relación de proporcionalidad y los valores estéticos del prototipo diseñado.

Para realizar una maqueta partimos de la representación en formato papel en la escala que queremos generar la maqueta, en carpintería y mobiliario es muy común trabajar las maquetas en escala 1/10, tradicionalmente las maquetas se han realizado con materiales fáciles de trabajar, económicos y de poca densidad.

Habitualmente, para valorar su atractivo visual, es decir, su apariencia, las maquetas se pintan de colores diferentes, buscando o pretendiendo con ello, percibir sensaciones que nos permiten compara y determinar los colores que resulten más adecuados a la estética del mueble.

¿En qué escala fabricas el prototipo? tradicionalmente se han utilizado dos escalas 1/2 y 1/1 , o lo que es lo mismo, a la mitad del tamaño real y al tamaño real, la elección de una u otra depende de múltiples factores, entre los que destacan:

• La propia complejidad del diseño, en escala reducida no se pueden valorar determinados detalles de fabricación, por ello, en estos casos, es conveniente optar por prototipos en escala real.
• Política de empresa, se teme a los costes generados en escalas reales y se opta por fabricaciones de prototipos en escalas reducidas, por mejor facilidad de manejo y de menor coste.
• Limitaciones de espacio, cuando se trabaja con varios prototipos, sean diferentes o modificaciones de otros previos, los espacios disponibles nos pueden condicionar en la opción de fabricar en una escala u otra.
• Equipamiento del taller de prototipos, es posible que el taller no esté equipado para fabricar prototipos de escalas reducidas o viceversa, los mecanizados aún siendo los mismos, necesitan herramientas de corte diferentes.

Aunque parezca que se han descrito todos los factores, no es así, y tienes que valorar otros que intervienen directa o indirectamente en la escala de fabricación del prototipo, como pueden ser: exigencias del cliente en prototipos de encargo, prototipos a testado previo, prototipos fabricados con materiales muy novedosos, procesos de fabricación del prototipo con moldes y contramoldes, entre otros.

¿Cuáles son las áreas de mecanizado en un taller de prototipos?, debes de considerar habitualmente tres zonas claramente diferenciadas:

• Área de mecanizado con máquinas convencionales o de bancada.
• Área de mecanizado con máquinas portátiles.
• Área de mecanizado con herramientas manuales.

Cada área estará equipada con máquinas y herramientas de acuerdo al proceso de mecanizado a realizar, cuando veas los equipamientos comprobarás que efectivamente, la diferencia es muy evidente.

En las imágenes puedes observar área de mecanizado con máquinas convencionales equipada con aspiración centralizada, área de trabajo para máquinas portátiles con conexiones aéreas de instalación eléctrica y neumática, determinando los bancos de trabajo el área de mecanizado con herramientas manuales.

Lo primero que debes tener en cuenta en todas las zonas de mecanizado es el espacio o extensión en planta, este será lo suficientemente amplio, con objeto de no impedir el libre tránsito de elementos a mecanizar de una zona a otra y el paso entre máquinas.

Lo segundo son las instalaciones generales necesarias, suministro eléctrico, instalación neumática, instalación de aspiración centralizada e instalación sanitaria.

Lo tercero son las condiciones higiénico ambientales de las zonas de mecanizado, no deben constituir una fuente de incomodidad o molestia para los trabajadores, debemos de comprobar si cumplen una serie de requisitos, siguiendo las guías del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, son las siguientes:

• Contaminación ambiental, si en los procesos de mecanizado se produce contaminación del ambiente con polvo o emanaciones de cualquier tipo, se debe disponer de las medidas de prevención y control para evitar que puedan afectar a la salud de los operarios.
• La ventilación de las zonas de mecanizado, en lo posible debes evitar utilizar espacios confinados, si utilizas estos espacios, deben disponer de ventilación auxiliar y estar ausentes de contaminantes y de materias inflamables o explosivas.
• Nivel de ruido, si en la zona de mecanizado los operarios están expuestos a un nivel sonoro continuo, sea propio o de otros compañeros, equivalente o superior a noventa decibelios, se debe utilizar protección auditiva.
• La iluminación de las zonas de mecanizado debe ser la adecuada a la tarea a realizar, teniendo en cuenta el mínimo tamaño a percibir, el contraste y el movimiento. La iluminación de cada zona o parte de un lugar de trabajo deberá adaptarse a las características de la actividad que se efectúe en ella, teniendo en cuenta:
  • Los riesgos para la seguridad y salud de los operarios dependientes de la condiciones de visibilidad.
  • Las exigencias visuales de las tareas de mecanizado a desarrollar.
  • Siempre que sea posible, las zonas de mecanizado tendrán iluminación natural, que deberá complementarse con una iluminación artificial cuando la primera, por sí sola, no garantice las condiciones de visibilidad adecuadas. En tales casos se utilizará preferentemente la iluminación artificial general, en tareas que requieran niveles de iluminación elevados se complementará con una localizada.
  • La intensidad mínima de iluminación de la zona de mecanizado debe de ser de unos 400 Lux, en aquellos trabajos de mecanizado de distinción moderada de detalles, podemos considerar 200 Lux aceptable.
• Las condiciones termohigrométricas de las zonas de mecanizado se deben de controlar siempre que sea posible, no deben constituir una fuente de incomodidad o molestia para los operarios. A tal efecto, deberán evitarse las temperaturas y las humedades extremas.
• La temperatura de las zonas de mecanizado estará comprendida entre los 14 y 25 ºC .
• La humedad relativa estará comprendida entre el 30 y el 70 %.

¿Qué máquinas debes considerar en un área de mecanizado de prototipos? Debes considerar que el mercado nos ofrece máquinas que se quedan fuera de clasificaciones simples, ofreciendo máquinas combinadas, máquinas universales de varias operaciones, prensas, entre otras. Por lo que ahora agruparás estas teniendo en cuenta diversos factores :

• Sierra de cinta y escuadradora, son máquinas para cortar madera y derivados.
• Cepilladora y regruesadora, son las máquinas típicas de labrar la madera.
• Taladro horizontal y escopleadora de cadena, en líneas generales se usan para mecanizar cajas para ensambles de elementos a caja y espiga, tanto pasantes como con mortaja.
• Lijadora de rodillo, la utilizamos en prototipos para el lijado de elementos curvados.
• Prensa, imprescindible para el chapado de superficies considerables.
• Torno, es una máquina para realizar elementos cilíndricos, muy común en talleres de prototipos.
• Tupí, es sin lugar a dudas la máquina de mayor utilidad en los talleres de prototipos, sus múltiples accesorios y herramientas de corte, nos permite realizar mecanizaciones muy diferentes.

El área de mecanizado con máquinas convencionales debe tener suficiente extensión en planta para la instalación del equipamiento de mecanizado de los distintos componentes del prototipo, las máquinas necesitan un espacio de manipulación y trabajo suficiente y que debes prever al diseñar la distribución y fijación de estas.

¿Qué debes considerar en la distribución de las máquinas en área de mecanizado? las consideraciones que debes respetar en la distribución de las máquinas se pueden resumir en:

• Respetar el espacio de trabajo de cada máquina.
• Distribución racional de las máquinas según la secuencia de las operaciones de mecanizado, ¿no te parece lógico que la sierra de cinta sea la máquina más cercana al almacén de materias primas?, ¿o que la cepilladora esté lo más cerca posible de la regruesadora?
• Aspiración centralizada del polvo, serrín y virutas, con canalizaciones aéreas o subterráneas conectadas a cada una de las máquinas.
• Instalación de conexión eléctrica subterránea con salida de conexión en la bancada de cada máquina.
• Instalación neumática con filtrado de aire en los puntos necesarios, hay diversidad de máquinas que necesitan para su funcionamiento estar conectadas a la instalación neumática.
• Espacio libre de separación entre máquinas suficiente, para no impedir el paso de carros u otros elementos de transporte con los materiales a mecanizar.

Recuerda que en la primera unidad, se clasificaban y describían las características generales de las máquinas portátiles utilizadas en el taller de prototipos, en dicha clasificación no se incluían las máquinas portátiles neumáticas, habitualmente los talleres de prototipos no utilizan dichas máquinas exceptuando las clavadoras, las máquinas neumáticas están más introducidas en líneas de producción en serie, en la imagen, como ejemplo, puedes ver: taladro, destornillador y lijadoras de banda y rotoorbital, máquinas que en su funcionamiento son generalmente muy ruidosas siendo obligatorio en varias de ellas utilizar protectores auditivos.

¿Qué debes considerar en el área de mecanizado con máquinas portátiles? normalmente esta área tiene la particularidad de necesitar bancos o mesas de trabajo para apoyar las máquinas o los materiales a mecanizar, además de dicha particularidad debes contar con las siguientes instalaciones:

• Eléctrica para la conexión de las diversas máquinas.
• Instalación neumática con filtrado de aire en los puntos necesarios, hay diversidad de máquinas portátiles que funcionan con aire comprimido y necesitan estar conectadas a la instalación neumática.
• Tanto la instalación eléctrica como la neumática no debe ser un estorbo para movernos alrededor de la mesa o banco de trabajo, para ello es conveniente que se instale aérea por encima de las mesas a una altura que permita su conexión sin dificultad.
• Aspiración centralizada del polvo, serrín y virutas, con canalizaciones aéreas o subterráneas conectadas a cada una de las máquinas, es conveniente que en los casos de máquinas que su conexión a la red de aspiración es compleja, utilices mesas auxiliares que incorporen dicha conexión, como las mesas de lijado.

¿Qué máquinas portátiles debes incluir en el área de mecanizado de prototipos? todas aquellas que te faciliten el trabajo de mecanizado de elementos del prototipo o del prototipo montado, es la máquina la que movemos habitualmente durante la operación de mecanizado y no al revés.

La variedad de usos y de formas, de accionamiento: conectadas a la red eléctrica o de batería, hace que el abanico de máquinas portátiles sea amplio, aunque podrás clasificarlas a pesar de que continuamente las empresas nos presentan nuevas máquinas para nuevos usos, sólo tienes que consultar catálogos, o entrar a los enlaces de los fabricantes de máquinas portátiles.

Una clasificación habitual para las máquinas portátiles, es por el trabajo que realizan:

• Máquinas para taladrar, las hay conectadas a la red eléctrica, neumáticas y de batería.
• Máquinas de aserrar, sierras de calar, sierras circulares, tronzadoras o ingleteadoras.
• Máquinas de lijar, las hay de banda, orbítales y rotoorbítales.
• Máquinas de cepillar, cepillos, cepillos enrasadores y garlopines.
• Máquinas de moldurar, fresadoras.
• Máquinas de juntar-ensamblar, fresadora de juntas comúnmente llamada galleteadora.

Has visto las áreas de mecanizado con máquinas convencionales y portátiles, y aunque es muy común que el área de mecanizado con máquinas portátiles y el área de mecanizado con herramientas manuales compartan espacio, no es lo conveniente, por lo que a continuación se señalan las características que debe tener el área de mecanizado con herramientas manuales:

• Siempre que sea posible, el área de mecanizado tendrá iluminación natural, que deberá complementarse con una iluminación artificial cuando la primera, por sí sola, no garantice las condiciones de visibilidad adecuadas, debes considerar que los trabajos en el área con herramientas manuales exige una intensidad de iluminación no inferior a 400 Lux.
• Estará equipada con bancos de trabajo lo suficientemente estables y dotados de elementos de fijación de piezas, de forma que no se muevan al realizar mecanizados manuales.
• Es importante que las herramientas tengan su sitio y que cada herramienta esté en su lugar, para ello es conveniente dotar el área con paneles verticales portaherramientas sujetos al paramento con las herramientas a la vista, en dicho panel estarán las herramientas que por sus medidas, usos o costumbre no estén incluidas en la caja de herramientas como el compás de varas, serrucho universal o basto, llaves fijas, escuadras y cartabones de grandes dimensiones, entre otras.

¿Qué herramientas manuales deberás tener en el mecanizado de prototipos?:

• Herramientas de aserrado: serrucho de costilla, serrucho de costilla fino o de ebanista, sierra de chapear y serrucho japonés.
• Herramientas de corte libre y guiado: escoplo, formones y gubias, y de corte guiado, acanalador, guillame, garlopa, cepillo de dos hojas.
• Herramientas de atornillar destornillar: destornilladores de puntas fijas y destornillador de puntas recambiables.
• Herramientas de extracción: tenaza y alicate.
• Herramientas de limado: escofina, limatón o lima redonda y lima de media caña.
• Herramientas de clavado y golpeo: martillo de ebanista y mazo.

La puesta a punto debe de ser un concepto global y no solamente individual que afecte exclusivamente a las máquinas. Siguiendo con éste planteamiento, la puesta a punto de las áreas de mecanizado debe comprender tanto las instalaciones, como los materiales y los equipamientos.

La puesta a punto de las instalaciones previas a las operaciones de mecanizado las puedes sintetizar realizando operaciones de control de las áreas de mecanizado, comprobando que:

• Están exentas de suciedad, virutas, serrín, desperdicios y obstáculos con los que puedas tropezar o te obstaculicen la facilidad de movimientos entre máquinas o por las áreas.
• Los paneles de herramientas se encuentran con todas las herramientas en su sitio.
• Las instalaciones eléctricas y neumáticas se encuentran en condiciones óptimas de uso, en instalaciones neumáticas es necesario realizar labores de mantenimiento, comprobando especialmente los filtros y proceder a la eliminación del agua acumulada mediante su purgado, siguiendo el protocolo establecido de mantenimiento de instalaciones y equipos.
• Que los sistemas de aspiración centralizada funcionan adecuadamente y que el silo de almacenamiento posee con la capacidad suficiente para acumular el polvo, serrín y virutas que se producen en el mecanizado de piezas.

Cuando nos referimos a la puesta a punto de los materiales, debes de comprender que son la base fundamental del mecanizado, sin ellos no hay mecanizado, y por tanto debes comprobar que se encuentran disponibles y en condiciones para su uso, manipulación y mecanizado. Dependiendo de sus características optarás por unas herramientas de corte u otras, igualmente su manipulación dependerá de las características dimensiónales, peso y acabado.

En la puesta a punto de los equipamientos, debes de controlar que tanto las máquinas, como los equipos de herramientas y auxiliares están en condiciones de ser utilizadas, ¿qué debes de comprobar en las máquinas y herramientas de mecanizado?, te diferenciamos la respuesta: podemos señalarte que en las máquinas debes de controlar fundamentalmente dos parámetros y en las herramientas uno sólo.

¿Qué parámetros de puesta a punto debes controlar en las máquinas?, limpieza-engrase y el estado de la herramienta de corte.

¿Qué parámetros de puesta a punto controlarás en las herramientas de mecanizado?, básicamente te fijarás y comprobarás el estado del filo de corte.

Las herramientas de corte te darán unos buenos mecanizados y rendimientos si poseen un filo en buenas condiciones y son las adecuadas al material a mecanizar, si la herramienta ha perdido su acción cortante debes de sustituirla, pasando ésta al proceso de afilado, afinado y triscado si es necesario.

Te preguntarás ¿qué son los procesos de afilado, afinado y triscado?, ¿cómo afilo, afino y trisco las herramientas?, ¿qué secuencia se sigue? y ¿qué herramientas puedo afilar?, vamos a tratar de darte respuesta a todas las preguntas planteadas:

• El afilado, es hacer más delgado o agudo el filo de una herramienta de corte mellada, embotada o gastada.
• El afinado, es perfeccionar el filo eliminando la rebaba que normalmente sale como consecuencia de algunos afilados.
• El triscado, recuerda que en la segunda unidad se definía el triscado como la operación de inclinar alternativamente a un lado y al otro, los dientes de una hoja de sierra.

Los afilados los realizarás dependiendo de la herramienta de corte, el proceso de afilado estará condicionado a la herramienta que tengas que afilar, debes diferenciar los procesos de afilado en:

• Afilado de herramienta manuales de corte libre y guiado.
• Afilado de sierras de cinta.
• Afilado de serruchos.
• Afilado de cuchillas de máquinas portátiles y convencionales, cepilladora y regruesadora.
• Afilado de fresas de máquinas portátiles y tupí.

Afilado de herramienta manuales de corte libre y guiado. Tradicionalmente las hojas de las herramientas de corte se han afilado en piedras llamadas mollejones, piedras circulares por cuyo centro pasa un eje que accionado por un motor, la hace girar y al pasar por una arqueta con agua que lleva el armazón, la piedra se empapa e impide que la hoja que estás afilando se caliente y, por tanto, evitas que el acero se destemple.

En la actualidad, y continuando con la tradición existen en el mercado máquinas de tamaño más pequeño que los mollejones tradicionales, que te ofrecen mejores prestaciones con muelas abrasivas de diversos granos, también dispones de máquinas de afilado en seco con muelas que giran a gran velocidad con mayor poder de abrasión, aunque tienen el inconveniente de calentar la herramienta, lo que te obliga a retirarla del soporte e introducirla en agua para enfriarla, normalmente éste tipo de máquinas incorporan dos muelas, una para el afilado y la otra para el afinado.

Para afilar debes apoyar correctamente la herramienta en la guía y fijarla debidamente con el husillo correspondiente, al mismo tiempo comprobar el ángulo de afilado, recuerda que los ángulos de corte no son los mismos en todas las herramientas, variando de 25 a 45º .

Realizada la primera operación pones la máquina en marcha, el contacto de la hoja de herramienta en la muela de movimiento rotatorio debe ser uniforme y sin excesiva presión, la hoja la debes mover de lado a lado en sentido horizontal siguiendo la guía de apoyo para amoldarla en toda la longitud del bisel evitando el desgaste irregular de la muela y del bisel, el proceso acaba cuando observes que en el lado opuesto del bisel se aprecia una ligera rebaba en todo su longitud.

Para afinar las herramientas, tienes dos opciones, utilizar la piedra plana en el banco, llamada piedra de aceite por estar lubricada con dicho producto, o realizarlo en la rueda de caucho con tratamiento de carburo de silicio, que en forma de pastilla pasarás por toda la superficie de la rueda en contacto con la herramienta, y que incorporan como doble equipamiento la mayoría de las máquinas de afilar.

En el asentado de la herramienta en la piedra de aceite la secuencia que debes seguir es la siguiente:

• Comienza por apoyar bien plana la cara contraria al bisel realizando movimientos lineales a lo largo de toda la piedra, hasta que observes que la rebaba ha pasado al lado del bisel.
• Apoya bien la parte del bisel colocándolo bien apoyado en la piedra con el ángulo adecuado y a continuación mueve la hoja con movimientos uniformes en forma de ochos.
• Repite el proceso hasta que observes que ha desaparecido la rebaba del afilado.

En el afinado en las ruedas o muelas cauchutadas, utiliza la misma guía de apoyo de herramienta que en el proceso de afilado, observa que la banda de caucho está con la superficie cubierta de carburo de silicio u otro producto de afinado, si no es así, aplica el producto pasándolo por la superficie de contacto de la muela, tienes que saber que el giro de rotación es contrario a la acción de apoyo de la herramienta para evitar su clavado y corte de la superficie cauchutada de contacto, la secuencia que debes seguir es la siguiente:

• Comienza por asentar la parte opuesta al bisel, mueve la herramienta para que se afine en todo el ancho de la herramienta, hasta que observes que la rebaba ha pasado al lado del bisel.
• Apoya la cara del bisel correctamente en el soporte con el ángulo adecuado.
• Repite las secuencias hasta que observes que ha desparecido la rebaba de afilado.

Para triscar, puedes diferenciar dos procesos: el triscado con herramienta manual o triscado con aparato mecánico de accionamiento manual o automático. Este tipo de triscado con herramientas de triscar, triscadores o trabas se sigue utilizando esporádicamente en los serruchos El accionamiento es muy sencillo, se trata de inclinar los dientes alternativamente a un lado u al otro de la hoja, previamente debes regular el parámetro de inclinación de los dientes en el triscador en forma de alicate.

Las cintas de sierra se triscan en los triscadores que incorporan las máquinas de afilar automáticas, el accionamiento de inclinación se realiza por medio de unos vástagos situados a los dos lados de la hoja accionados manualmente por una manivela al pasar los dientes o también automáticamente, la inclinación de los dientes se realiza en el tercio de la parte superior de estos.

Afilado de hojas de sierra y serruchos, al igual que con el triscado diferenciarás dos procesos, el manual con herramienta de limado triangular y con máquinas de afilado automático. El afilado con lima triangular se realiza exclusivamente sobre serruchos limando uno a uno los dientes de la hoja previamente fijada en la mordaza de afilado, tienes que procurar utilizar limas triangulares los más ajustadas posibles al ángulo del diente.

Las cintas de sierra se afilan en máquinas automáticas de afilado, la regulación de parámetros de profundidad de diente, paso de diente, forma de diente y pasada de afilado se realiza para cada hoja de sierra. Es muy difícil que en las hojas de sierra coincidan los parámetros descritos, para la regulación de los parámetros deberás leer las instrucciones de uso que acompañan a las máquinas. En la imagen puedes apreciar la disposición de la cinta para su afilado apoyada en dos ruedas laterales.

Afilado de cuchillas de máquinas portátiles y convencionales, cepilladora y regruesadora, existe una gran variedad de máquinas de afilar cuchillas, en formato individual o formando parte del equipamiento de otras máquinas como accesorios. Generalmente constan de un carro deslizable en el que has sujetado las cuchillas dispuestas para el afilado al pasar por una piedra de afilado en forma de vaso que va desgastando el acero hasta que se eliminan los mellados y saca rebaba en toda la longitud de la cuchilla. Afiladas las cuchillas se realiza el afinado en la piedra de aceite siguiendo el mismo procedimiento que con las herramientas de corte libre.

Las secuencias de puesta a punto de una herramienta de corte se establecen según la herramienta. En las herramientas de corte libre o guiado y las cuchillas de máquinas portátiles y convencionales se realiza primero el afilado y posteriormente el afinado, las dos operaciones van secuencias siempre en todo proceso de afilado.

En las cintas de sierra y serruchos, se realiza primero el triscado y posteriormente el afilado. El triscado no se realiza siempre que se afila, únicamente cuando se ha perdido la inclinación de los dientes.

¿Qué herramientas puedes afilar? casi todas, excepto con las hojas de corte desechables con las que se equipan algunos cepillos portátiles, plaquetas desechables que incorporan cabezales de mecanizado y la mayoría de las fresas para máquinas portátiles.

En los talleres de prototipos no se cuenta con equipamientos de máquinas de afilar herramientas de metal duro, realizándose el proceso de afilado de fresas y discos de corte por empresas externas, o en el taller de afilado de l

a propia empresa por personal especializado.

Los protectores son elementos instalados en las máquinas, destinados a impedir el acceso a las herramientas de corte y limitar los riesgos que se presentan durante el trabajo. Los protectores no eliminan el riesgo de sufrir un accidente y en ocasiones, si está mal regulado, pueden aumentarlo. Los protectores te impiden la visión de la herramienta de corte y, si están mal colocados, se anula la función para la que se han instalado.

Los protectores se denominan y clasifican dependiendo de la máquina a la que van destinados, y se instalan y regulan según el mecanizado a realizar, por lo que los diferenciarás por máquinas:

• Los protectores de las sierras de cinta se centran en cubrir todo el recorrido de la cinta de corte. Existen en el mercado diferentes modelos y su reglaje es muy sencillo, te limitarás a fijar el parámetro de la altura de corte según el espesor de las piezas a aserrar.
• Los protectores de las cepilladoras. Son autorregulables tanto al espesor como al ancho de las piezas y protegen totalmente el eje porta cuchillas disminuyendo el riesgo al máximo. Dependiendo del mecanizado variarás la disposición de la palanca de autorregulación del protector, palanca que al recibir el empuje de la pieza acciona el levantamiento o deslizamiento en dirección contraria a la guía o paralelograma de apoyo de la pieza, permitiendo su paso y cerrando el eje portacuchillas automáticamente una vez la pieza ha pasado.
• Los protectores de las sierras de disco y escuadradoras deben de cumplir dos objetivos, impedir que introduzcas las manos al disco de corte e impedir que las piezas puedan salir lanzadas con violencia. La colocación del cuchillo divisor del mismo espesor que el disco de corte minimiza el lanzamiento de las piezas, pero la conducción incorrecta de las piezas al corte puede ocasionar dicho lanzamiento. Los protectores autorregulables mediante rodillos y cubierta de carcasa en metacrilato con aspiración centralizada, están resultando los más eficaces en el campo de la protección de sierras de disco y escuadradoras, su regulación es por empuje del material a cortar y se adaptan al espesor de corte automáticamente.
• Los protectores de las sierras ingletadoras , radiales y de disco se adaptan automáticamente al iniciar el accionamiento de corte, cubriéndose en su totalidad el disco al acabar el corte de las piezas o levantar el disco en ingletadoras.
• En la máquina de escoplear de cadena, el protector se va desplazando conforme va penetrando la cadena en la pieza a mecanizar, por ello, debes de comprobar que el protector realiza el desplazamiento correctamente, no permitiendo el acceso a la cadena de corte.
• En sierras y formones, los elementos de protección de filo también nos protegen de cortes involuntarios al manipular las herramientas. Debes mantener y guardar las herramientas con los protectores puestos.

La tupí ha sido, en el campo de la protección, la máquina que ha tenido una mayor investigación, la versatilidad de operaciones que se pueden realizar en ella hace especialmente difícil o imposible el adaptar un solo elemento de protección para todos los procesos de mecanizado.

Los elementos de protección en la tupí debes utilizarlos independientemente del número de piezas a mecanizar, evita la pasadas de prueba sin colocar el protector, es precisamente en estas pruebas en dónde se producen la mayoría de los accidentes.

Con los alimentadores automáticos de piezas conseguirás reducir el riesgo de accidente al máximo, impidiendo que las manos entren en contacto con la herramienta de corte, aunque únicamente se puede utilizar en operaciones con guía, debes emplearlo por reducido que sea en número de piezas a mecanizar. En la imagen puedes observar un inicio de mecanizado en pasada de prueba sin colocar elementos de protección, con el riesgo de lanzamiento de la pieza e introducción de los dedos en la herramienta de corte.

Los sistemas de protección en operaciones de mecanizado a tope de árbol y a moldura cortada, que normalmente han sido las operaciones que entrañan un mayor riesgo, han experimentado un espectacular avance con la introducción de elementos de protección específicos como:

• Prensores de las piezas.
• Cubiertas y pantallas transparentes del eje.
• Topes integrados de profundidad en el propio eje y de rechazo.
• Varillas de apoyo al rebaje.
• Varillas puente, que nos unen las dos partes del paralelograma o guía.
• Mesas adaptables al trabajo a realizar.

consiguiendo que el número de accidentes haya descendido notablemente. En las imágenes puedes observar tres sistemas de protección adaptados al mecanizado en tupí como son el de varillas puente, el protector frontal de pantalla transparente y el alimentador automático de rodillos.

Recuerda que el conocimiento de los riesgos de las máquinas y herramientas conlleva un análisis de las situaciones de riesgo que puedes observar en el mecanizado de cualquier elemento que conforma el prototipo, análisis que tendrás en cuenta al realizar cualquier mecanizado, tanto con herramientas manuales o máquinas.

A continuación identificarás los riesgos en operaciones de mecanizado, diferenciándolos en riesgos mecánicos y humanos:

• Los riesgos mecánicos en operaciones de mecanizado los identificás en:

  • Entrada en contacto con partes de la máquina o herramientas que puedan producir un accidente.
  • Proyección o lanzamiento de herramientas de corte, sea por, rotura o colocación deficiente.
  • Rechazo de materiales o partes de estos desde la máquina, sea por material con defectos, sierra aprisionada por el material o útiles inadecuados de corte.

  • Rotura del mango de la herramienta.

• Los riesgos humanos en operaciones de mecanizado los identificás en:

  • Mal reglaje de dispositivos de seguridad.
  • Pasada de prueba sin colocar dispositivos de protección.
  • Técnica de uso inadecuada.
  • Reglaje de la máquina sin estar parada.
  • No utilizar los EPIs, identificados en cada una de las máquinas o herramientas.
  • No respetar los protocolos de actuación antes, durante y después el uso de herramientas manuales, máquinas portátiles y convencionales.

Recuerda la cantidad y variedad de máquinas que conforman el equipamiento del taller de prototipos, los riesgos definidos tienen carácter general y son aplicables a todas las máquinas y herramientas de mecanizado.

El correcto mantenimiento de las herramientas manuales comienza por evitar su amontonamiento, el lugar habilitado para ellas en la zona de mecanizado debe impedir su deterioro, las herramientas de corte las debes guardar con el protector de filo colocado.

Las herramientas, atendiendo a las operaciones que realizamos con ellas, las clasificarás en:

• Herramientas de aserrado.
• Herramientas de corte libre y guiado.
• Herramientas de atornillar y destornillar.
• Herramientas de golpeo, clavado y extracción.
• Herramientas de raspar, limar y pulir.

Debes tener muy presente las siguientes observaciones en el uso de herramientas manuales para el mecanizado:

• Comprobar el estado del filo, en el caso de verificar que su filo no está en buenas condiciones, lo aconsejable es que procedas a su afilado.
• Seleccionar la herramienta adecuada según las exigencias del material a mecanizar y las características del mecanizado a realizar.
• Utilizar las herramientas de mecanizado aplicando la técnica adecuada.
• Posicionar el cuerpo correctamente, cada tipo de mecanizado requiere una posición de trabajo que te facilitará su realización.
• Guardar las herramientas una vez utilizadas en los espacios habilitados para cada una de ellas. En los paneles y cajones de herramientas procura mantener el orden o espacio prefijado y coloca los guarda filos a las herramientas.

¿Qué riesgos debes asociar a la operaciones de mecanizado con herramientas manuales?, normalmente las asociarás a cortes producidos por herramientas de corte libre, generalmente formones, las restantes herramientas no entrañan más riesgos que leves rasguños.

Una premisa a cumplir en el protocolo de seguridad en el manejo de herramientas de corte libre es no colocar nunca la mano en la trayectoria de la herramienta, habitualmente la mano accidentada es la mano libre o de sujeción de la pieza, pues suele encontrarse en la dirección del corte, que por acción del empuje de la mano que maneja la herramienta, o por mal uso, o por empuje excesivo, se desplaza incontroladamente originando el accidente.

En herramientas de golpeo o clavado los riesgos van asociados a golpes en los dedos, debes evitar colocar los dedos en la trayectoria del mazo o martillo. En el clavado de puntas, debes sujetarlas con los dedos lo más cerca posible de la cabeza de la punta, y una vez iniciado el clavado con golpes suaves, retiras la mano y finalizas la acción de clavar sin sujetar el clavo.

Existen múltiples tipos de herramientas de aserrado, pero hemos seleccionado las más utilizadas para que adquieras su manejo. La elección de una herramienta de aserrado u otra dependerá del material y el corte a realizar.

Una vez seleccionada la herramienta comprobarás el estado de los dientes, fijándote en su triscado y afilado, la técnica de aserrado que debes utilizar variará en función de los siguientes factores:

• Tipo de herramienta seleccionada.
• Características del material a cortar: madera maciza, tableros aglomerados, contrachapados, entre otros.
• Tipo de aserrado a realizar: transversal, longitudinal, de longitud pequeña o grande, corte fino de precisión o basto para mecanizado, entre otros.

En operaciones de aserrado, especialmente en piezas pequeñas, deberás sujetarlas con la mano libre a un soporte llamado cortador, que previamente has fijado con la prensa al banco de trabajo, dicho soporte te facilitará el corte transversal perpendicular o en ángulo, generalmente a 45º , con unos cortes de guía que lleva incorporados el propio soporte.

La técnica de aserrado comienza con la disposición del cuerpo en la posición de trabajo, para ello, debes tener en cuenta:

• Adoptar una postura que te resulte cómoda, te facilitará el trabajo (no debes agacharte en exceso).
• Avanzar ligeramente la extremidad inferior contraria a la extremidad superior que maneja el serrucho.
• Inclinar el cuerpo ligeramente hacia delante, para cargar el peso en el avance del serrucho.
• Apoyar la extremidad superior libre en la pieza a mecanizar y cargar el peso del cuerpo sobre ella.

Una vez que tienes posicionado el cuerpo para el manejo del serrucho puedes iniciar el corte respetando las siguientes fases:

• Inicio de corte, debes deslizar el serrucho suavemente en movimiento de retroceso hacia ti siguiendo la línea de corte, el siguiente movimiento es de avance con ligera presión del serrucho, repetirás la operación hasta que veas que has marcado el corte, es conveniente que guíes el serrucho haciendo tope con el pulgar de la mano contraria a la que acciona el serrucho.
• Aserrado de la pieza, retiras el dedo pulgar y posicionas el serrucho en el ángulo de corte deseado, en cortes transversales unos 45º y en los longitudinales es conveniente que respetes los 60º respecto a la cara superior de la pieza que mecanices, en sucesivos movimientos de avance y retroceso vas cortando la pieza, en el movimiento de avance realizas el esfuerzo de corte y retrocedes suavemente, aprovecha al máximo la longitud del serrucho en los movimientos. Algunos serruchos como los japoneses difieren en el movimiento de corte, realizando la función de corte de la madera en el retroceso y no en el avance, debiendo aplicar la técnica de aserrado contraria.
• Finalización del corte. Disminuye paulatinamente la velocidad del movimiento y de fuerza, evita el corte en su totalidad y sujeta la pieza sobrante para evitar el astillado.

El serrucho de costilla posee una mayor rigidez al tener el refuerzo en la hoja de sierra, permitiéndote realizar cortes de mayor precisión. Los serruchos universales o bastos los utilizarás para el corte de piezas de mayor longitud de corte y para cortes de menor precisión. Los serruchos de chapas, para su accionamiento, utilizan una pieza de madera o regla que emplearás como guía de corte, la presión de corte es muy suave y debes de cortar generalmente en retroceso.

¿Cuáles son las herramientas de corte libre? las que accionas manualmente sin guiado de la hoja de corte. No tienen condicionada ni la dirección ni la profundidad y su manejo depende de ti exclusivamente.

La herramienta manual de corte libre que más utilizarás será el formón en sus distintos anchos de hoja. En trabajos de acanaladuras o talla usarás las gubias en sus múltiples formas de perfiles de corte y en trabajos de escuadrado de cajas usarás el escoplo.

La técnica de manejo de las herramientas de corte libre es similar en los tres tipos de herramientas descritos, para su manejo debes tener en cuenta:

• Las piezas deben de estar bien sujetas al banco de trabajo, evitando trabajar en piezas sujetas únicamente con la mano, para ello utiliza la prensa del banco o los gatos.
• En el manejo de las herramientas, verás que no tienen una posición única ni de sujeción ni acción de corte mediante fuerza de golpeo o trabajo. Una veces sujetarás fuertemente la herramienta del mango y golpearás con el mazo, en otras ocasiones controlarás mejor el golpe si lo haces con la propia mano guiando la herramienta con la otra mano posicionada en la hoja, en otras ocasiones realizarás su manejo con las dos manos en movimientos coordinados en zig-zag.
• Para trabajar, posicionas el formón con el bisel hacia arriba o abajo dependiendo del trabajo a realizar, siempre que puedas y el mecanizado lo permita trabaja con el bisel de corte hacia abajo, te permitirá un mayor control y facilidad en el corte.
• En el corte con formones y gubias, trabaja siempre que se pueda a favor de fibra, reduce al mínimo posible los cortes a contra fibra o al través de la fibra.
• En el trabajo en la testa de las piezas encontrarás una gran resistencia en el avance de la herramienta, realiza los cortes en pasadas con poca profundidad y dando cortes muy cortos.

Las herramientas de corte guiado las utilizarás para desbastar, labrar y pulir la madera, generalmente el cepillo lo usarás para desbastar o labrar y el de dos hojas para pulir, el guillame lo utilizarás para realizar galces y acanaladuras, la elección de una herramienta u otra dependerá del trabajo a ejecutar, la técnica de manejo de las herramientas comienza en la posición del cuerpo, para ello debes tener en cuenta los siguientes factores:

• Adopta una postura que te resulte cómoda, te facilitará el trabajo.
• Avanza ligeramente la extremidad inferior contraria a la extremidad superior que empuja desde la parte trasera la herramienta.
• Inclina el cuerpo ligeramente hacia delante, para facilitar la fuerza que hacemos para el avance de la herramienta.
• La pieza fíjala a la altura de la cadera, dominarás con mayor facilidad la operación y evitarás el adoptar una postura que te producirá un mayor cansancio físico.

Para labrar la madera deberás seguir las siguientes indicaciones:

• Observa la dirección de las fibras, en algunas maderas resulta muy complicado el labrado por las variaciones de la fibra, siempre que puedas selecciona la dirección de mecanizado a favor de fibra, también conocido como trabajar a favor de veta.
• Comprueba el saliente de la cuchilla, no trabajes con mucho hierro, es preferible realizar más pasadas.
• Ejerce ligera presión con la mano colocada en la parte delantera de la herramienta, en ese momento empujas la herramienta con la mano situada en la parte trasera.
• Mantén la herramienta horizontal encima de la pieza, al terminar la pasada ejerce presión en la parte trasera a la vez que empujas, dejando de hacer presión en la parte delantera.
• La viruta saldrá uniforme si realizas bien los movimientos, de no ser así, comprueba el filo o posición de la contrahoja.

Para controlar la profundidad del corte en el cepillo dar ligeros golpes en la parte superior de la cuchilla hasta que obtengas la adecuada al trabajo, fijando dicha profundidad con la cuña, para quitar profundidad debes dar unos golpes en la parte posterior de la caja. En las herramientas metálicas regulas la profundidad de corte mediante el accionamiento del tornillo de avance y retroceso de la hoja y palanca de fijación.

En mecanizados en testa, coloca una pieza de madera de restos al final de la pasada y sujeta con un gato, para evitar que se astille al acabar la pasada.

En mecanizados transversales a la fibra es conveniente que realices las pasadas en sentido oblicuo, de no hacerlo así dejarás las superficies mecanizadas muy irregulares y ásperas.

En la realización de galces o acanaladuras con el guillame utiliza una regla de madera que te sirva de guía en toda la longitud del mecanizado, evita realizar pasadas con mucha profundidad de corte, en la imagen puedes observar el trabajo habitual de un guillame realizando un rebaje o galce, a diferencia del cepillo, la caja tiene la misma medida que la cuchilla de corte y por ello al ir abierta la viruta es expulsada lateralmente.

Estas herramientas ya las conoces y con toda seguridad las has utilizado en más de una ocasión, por estar entre las de mayor uso en nuestra vida cotidiana, las herramientas propuestas, así como su manejo son las siguientes:

• Destornillador. Se diferencian por el tamaño y la punta de ajuste en la cabeza del tornillo, en general todos tienen un vástago o pala en la que en un extremo lleva un mango de accionamiento de madera u otro material y en el otro extremo o boca con la forma adaptable a la de la cabeza del tornillo, existe gran variedad, los más usuales son los de boca plana y por encima de éstos los de boca en forma de estrella. Dispones de destornilladores que con el mismo mango puedes extraer el vástago y darle la vuelta para utilizar cualquiera de las bocas una acabada plana y la otra de estrella con las que va dotado, así mismo hay herramientas con la punta recambiable, de tal modo que le puedes acoplar cualquier tipo de punta como las que puedes ver en la imagen, va dotado con la punta imantada de forma que al introducir las puntas se fijan al hueco del extremo del destornillador y por tanto, no corres el riesgo de que se salgan o se pierdan.

El manejo del destornillador es muy sencillo, se trata de realizar giros a derechas o izquierdas según sea introducir o sacar el tornillo sujetando el mango fuertemente con la mano, para su manejo debes de seguir los siguientes pasos:

• Al principio no hagas mucha presión para ir incrementándola según te la solicite la introducción del tornillo.
• Es conveniente que hagas un pequeño agujero de guía, siempre de diámetro inferior al del tornillo, para introducir tornillos.
• Elige siempre la forma y tamaño de la boca que mejor se acople a la forma y tamaño de la cabeza del tornillo.
• Selecciona la herramienta con el mango y tamaño que te resulte más cómoda.

Los mazos o mazas que utilizamos para golpear a los mangos de formones y gubias o para armar bastidores ensamblados, son conocidos como herramientas de golpeo. Los más utilizados son los fabricados totalmente en madera maciza, generalmente de haya. Se diferencian tres tipos de mazos por su forma y fabricación:

• Los trapezoidales, cuya cabeza de la maza se estrecha ligeramente en dirección al mango.
• Los de cabeza torneada , la cabeza torneada simétrica en ligera conicidad con el mango en el centro.
• Los de tallista, se diferencian de los anteriores por la cabeza y su disposición en el mango, la cabeza tronco cónica redonda va formando parte del mismo mango o independiente en la misma dirección, los puedes encontrar con la cabeza de bronce.

Su manejo es muy sencillo, debes de coger la herramienta con la mano lo más alejada posible de la cabeza, diferenciándose dos maneras de golpear:

• Para armar bastidores, generalmente necesitarás bastante fuerza en los impactos, para ello la mano debe ir al final del mango y dar golpes precisos, para evitar el marcado de la madera interpón una madera de desecho entre el bastidor y la cabeza de la maza.
• Para acompañar en el mecanizado del formón o gubias en talla, los golpes debes darlos con poca fuerza de impacto, muy seguidos, repetidos y con la herramienta muy equilibrada.

En la operación de introducir clavos utilizarás los martillos, herramienta con la cabeza de hierro y mango de madera. Según la forma de la cabeza puede ser de orejas o de carpintero, de cabeza esférica o de ebanista, es éste último el que habitualmente lo consideramos como equipamiento básico de una caja de herramientas. En la técnica de manejo debes de seguir las siguientes fases:

• Coger el mango por el extremo y con el dedo pulgar situado en la parte superior y en dirección a la cabeza del martillo, cuanto más al extremo cojas el mango menor esfuerzo debes de realizar para obtener más fuerza en el golpe sobre el clavo.
• En el inicio de introducción del clavo das unos golpes suaves y cortos en la cabeza del clavo que tendremos sujeto con los dedos de la mano contraria.
• Cuando tengas el clavo ligeramente introducido, retiras la mano y golpeas con mayor fuerza, hasta introducirlo completamente.
• Evita en el último golpe marcar la madera, si quieres introducir el clavo en su totalidad o embutirlo ayúdate de un botador, herramienta que te permite introducir el clavo sin dañar la madera.
• Debes de observar que la cabeza del martillo no tiene restos de cola, grasa u otro producto, si es así, lija la superficie de golpear con un papel de lija fina, con ello evitarás que en la acción del golpe la herramienta resbale y doble el clavo o lo que es peor, marques la madera.
• Los golpes debes realizarlos perpendiculares al clavo, y en el momento del golpe la cabeza del martillo debe estar horizontal.
• Siempre que introduzcas varios clavos, no los sitúes en la misma línea o veta, te expones a rajar la madera.
• En maderas blandas puedes dar un golpe de martillo a la punta del clavo para mellarlo, evitando que la madera haga efecto de cuña abriendo las fibras.

Para extraer los clavos utilizarás la tenaza y en menor medida el alicate, en la técnica de manejo debes de seguir este procedimiento:

• Si el clavo está totalmente embutido dentro de la madera, realiza una embocadura alrededor del clavo con el formón hasta que puedas aprisionarlo con la tenaza o el alicate.
• Una vez aprisionado el clavo, haz palanca sobre la superficie en dirección opuesta a la curvatura de los labios de la tenaza.
• Para evitar marcar la madera en la acción de palanca, coloca la cuchilla de pulir entre la superficie de la madera y la herramienta.
• No extraigas el clavo en un solo movimiento, es conveniente desplazar el punto de aprisionamiento de la tenaza o alicate lo más cercano a la superficie, con lo que conseguirás no doblar en exceso los clavos extraídos.

Para raspar, limar y pulir la madera emplearás respectivamente la escofina, las limas y la cuchilla de ebanista, en las operaciones de raspado y limado debes seguir las siguientes fases:

• La pieza de madera a trabajar debes de fijarla a la altura del codo, dominarás con mayor facilidad la operación y evitarás adoptar una postura que te producirá un mayor cansancio físico.
• Adopta una postura que te resulte cómoda, te facilitará el trabajo.
• Avanza ligeramente la extremidad inferior contraria a la extremidad superior que empuja y empuña el mango de la herramienta.
• Inclina el cuerpo ligeramente hacia delante, para facilitar la fuerza que hacemos para el avance de la herramienta.
• Procura colocar la mano libre en la punta de la escofina o lima para guiarla en el recorrido.
• En la herramienta debes de ejercer presión en el movimiento de alejamiento, en el retroceso levanta ligeramente la herramienta y vuelve a ejercer presión nuevamente en el siguiente movimiento de alejamiento en la extensión de los brazos.
• Procura llevar la herramienta oblicuamente, dominarás mejor los movimientos y realizarás acabados superficiales mucho más homogéneos.
• Como resultado de la operación los dientes o estrías de las herramientas, se llenan de restos de material, polvo y especialmente resina, quedando embotada la herramienta, en estas condiciones de reduce el efecto de arrancado de la madera.
• Utiliza la carda para limpiar el embotado de las limas y escofinas.

En las operaciones de pulido con la cuchilla de ebanista o de pulir, ten en cuenta lo siguiente:

• Las cuchillas de ebanista o de pulir debes se manejan con ambas manos.
• Siempre que sea posible trabaja en dirección de veta.
• En el manejo de la cuchilla coloca las manos correctamente, con los dedos pulgares realiza presión en el centro de la cuchilla al mismo tiempo que vas desplazándola en la superficie a pulir, aquí debes diferenciar dos movimientos: uno el de alejamiento del cuerpo y el otro de acercamiento.
• En toda la operación de pulido mantén la cuchilla en un ángulo de corte de 75 a 80º con respecto a la superficie de la pieza.
• Realiza pasadas largas de desplazamiento de la herramienta, observa si van desapareciendo las marcas del mecanizado anterior.

Con las máquinas portátiles debes evitar su amontonamiento, el lugar habilitado para ellas en la zona de mecanizado tiene que ser tal, que impida su deterioro, debe ser de fácil acceso y tener cada máquina su espacio para guardarlas tras su utilización, si no es permanente o habitual su uso, es conveniente guardarlas en la caja suministrada por el fabricante.

Las máquinas portátiles, atendiendo a las operaciones que realices con ellas, las clasificarás en:

• Máquinas de aserrado.
• Máquinas de cepillar o labrar madera.
• Máquinas de lijado.
• Máquinas para taladrar y destornillar.
• Máquinas de fresar.
• Máquinas de juntar, ensamblar.

Debes considerar las siguientes observaciones en el uso de máquinas portátiles:

• Comprueba la herramienta de corte, en el caso de verificar que su filo no está en buenas condiciones, lo aconsejable es que procedas a su sustitución.
• Selecciona la máquina y herramienta de corte adecuada según las exigencias del material a mecanizar y las características del mecanizado a realizar.
• Utiliza las máquinas portátiles con la técnica adecuada.
• Posiciona el cuerpo correctamente, cada tipo de máquina y mecanizado requiere una posición de trabajo que te facilitará el mecanizado.
• Guarda las máquinas una vez utilizadas en los espacios habilitados para cada una de ellas, procura mantener siempre el orden o espacio prefijado.
• Lee detenidamente las instrucciones del fabricante.

¿Qué riesgos puedes asociar a las operaciones de mecanizado con máquinas portátiles? al tratarse de máquinas-herramientas eléctricas, los riesgos los debes de asociar a la posibilidad de un contacto eléctrico o cortes por manejo incorrecto. Independientemente de las características específicas de cada máquina debes de tener en cuenta las siguientes reglas básicas en su manejo:

• Utiliza los equipos de protección individual (EPIs), cuando trabajes con ellas.
• No cojas las herramientas del cable de conexión eléctrica.
• No conectes a la red las máquinas tirando del cable.
• Comprueba el estado del cable y del elemento de conexión antes de su conexión a la red.
• No dejes la máquina conectada cuando no la utilices.
• No realices operaciones de cambio de herramientas de corte o mantenimiento estando conectada la máquina.
• No utilices las máquinas en zonas muy húmedas o con lluvia.

Lo importante para trabajar con estas máquinas es que conozcas las técnicas de manejo, que se describen a continuación:

• La sierra de calar la utilizarás en el perfilado de piezas de prototipos, para su uso debes de seguir las siguientes fases:
  • Selecciona la hoja de corte adecuada al material a cortar, comprueba el filo de la hoja.
  • Si tienes que cambiar la hoja desconecta la máquina de la red eléctrica.
  • Fija la pieza a cortar en el banco de trabajo o en caballetes a una altura que te resulte cómoda para el movimiento de la máquina.
  • Comprueba que debajo de la pieza no existen obstáculos en la línea de corte.
  • Ajusta el movimiento orbital y velocidad de oscilación a las características del material y corte a realizar.
  • Una vez apoyada la parte delantera de la base de la máquina, aprieta el gatillo de puesta en marcha bloqueándolo.
  • Sigue la línea de corte marcada con movimiento uniforme, sujeta por la empuñadora la máquina con una sola mano, en determinados cortes puedes controlar su guiado con la mano libre, colocándola en la parte delantera de la máquina.
  • En cortes con guía lateral, procura mantener la guía oprimida en todo momento al canto de referencia.
  • En cortes con inclinación de base, cortes a bisel, utiliza una regla de madera fijada sobre la pieza que te sirva de guía.

  • Antes de finalizar el corte sujeta la pieza sobrante para evitar que astille en la caída.

• La sierra circular portátil es una máquina de fácil manejo, aunque peligrosa, y que utilizarás en el corte de tableros de grandes dimensiones y piezas de madera maciza en cortes transversales, para su puesta en marcha y manejo sigue las siguientes fases:

  • Comprueba que el disco de corte es el adecuado al material a cortar y su estado de afilado.
  • Ajusta la profundidad de corte, no la sobrepases en exceso, existe una regla no escrita para la profundidad de corte de los discos, limitándola al saliente visto de tres dientes por debajo del espesor del material a cortar.
  • Comprueba que el protector del disco se abre al iniciar el corte y cubre el disco al acabar.
  • Siempre que puedas trabaja con guía, evita los cortes a mesa libre.
  • Aprieta el gatillo de puesta en marcha y acciona el bloqueo.
  • En el corte sujeta la máquina firmemente con las dos manos y desplaza la sierra a un ritmo uniforme.
  • Ante cualquier imprevisto no fuerces la máquina, aprieta el gatillo de puesta en marcha y espera a que pare el disco de girar sin mover la máquina.
  • Si tienes que realizar cambio de disco, inclinar la base para cortes a bisel o limitar la profundidad de corte. Siempre debes hacerlo con la máquina desconectada de la red eléctrica.

La sierra de disco tronzadora o ingletadora, es la máquina que utilizarás para el corte de la madera a un ángulo determinado. En los talleres de prototipos es muy utilizada en el corte transversal de piezas de perfiles regulares, para su manejo debes de respetar las secuencias establecidas en el protocolo de actuación, en el que se establecen las secuencias a realizar antes, durante y después de usar la máquina.

Antes de utilizar la máquina: como norma general, debes tener en cuenta las siguientes secuencias:

• Comprueba que el disco de corte está en buenas condiciones de afilado, y que es el apropiado para cortar el material.
• Verifica que el ángulo de corte y el ángulo de inclinación del disco es el adecuado.
• Comprueba que el apoyo de la pieza es el correcto, en piezas muy largas utiliza un rodillo regulable en altura.
• Sujeta la pieza fuertemente contra la mesa y tope vertical para evitar desplazamientos.
• No cruces las manos para la sujeción, si manejas el accionamiento de la sierra con la mano derecha, con la mano izquierda sujeta la pieza en el lado izquierdo del corte de la sierra o viceversa.
• Aprieta el gatillo de puesta en marcha desbloqueando la bajada de disco.

Durante el aserrado con la máquina establece las siguientes actuaciones:

• Espera a iniciar el corte hasta que la máquina ha alcanzado las rpm de trabajo.
• Baja el disco a ritmo de corte, evita la bajada brusca del disco al iniciar el corte en el primer contacto del disco sobre la pieza.
• No te muevas cuando estés usando la máquina, mantén la posición de trabajo.
• Trabaja de forma que el sobrante de la pieza quede libre, evitarás su lanzamiento por atrapamiento.
• Toma precauciones en el corte de nudos, contravetas o contrafibras, entre otras.

Después de usar la máquina: debes actuar siguiendo estas normas:

• Deja la máquina parada, no te alejes hasta que el disco ha dejado de dar vueltas.
• Sube el disco hacia arriba para que el protector tape completamente el disco.
• Retira recortes generados y material utilizado.

Estas máquinas, a diferencia de otras máquinas portátiles, tienen poca aplicación en el prototipado, aunque mucha en instalación de elementos de carpintería o mobiliario. La que utilizarás para mecanizar elementos de prototipo es el cepillo enrasador.

Lo emplearás para enrasar los macizados perimetrales o a uno o varios cantos de los tableros. ¿Qué son los macizados? son uniones encoladas que realizarás mecanizadas o a tope en los cantos de los tableros, con piezas de madera maciza, con la finalidad de permitir su posterior moldurado o perfilado. Tienen su aplicación en prototipos con tableros de mesa o elementos de mobiliario moldurados, perfilados o lacados. Es la operación previa al rechapado con marquetería y otros tipos de revestimientos del panel o elemento macizado, este proceso ha sido sustituido con la utilización de tableros de fibras de densidad media en elementos lacados, pero se mantiene en los elementos barnizados con poco teñido con resaltado del veteado de la madera.

Para trabajar con las máquinas de labrado debes respetar las siguientes fases:

• Comprueba el estado de las cuchillas, en caso de estar embotadas debes sustituirlas siguiendo las instrucciones facilitadas por el fabricante.
• Para comprobar el estado de las cuchillas realiza el giro del portacuchillas auxiliándote de un resto de madera, nunca con la mano.
• Recuerda que cualquier manipulación la debes realizar desconectada la máquina de la red eléctrica.
• Antes de la puesta en marcha comprueba el parámetro de profundidad de corte, en máquinas de labrado lo llamamos dar hierro. La profundidad la regularás actuando sobre la base delantera de la máquina, en su valor cero, las dos bases están enrasadas con la circunferencia de corte del eje portacuchillas y no mecaniza.
• Verifica que el protector telescópico del eje portacuchillas cubre en su totalidad el eje.
• Fija la pieza a mecanizar en el banco de trabajo o en caballetes, a una altura que resulte cómoda para el movimiento de la máquina.
• Apoya la máquina en posición de trabajo y sujétala firmemente con las dos manos.
• Aprieta el gatillo de puesta en marcha y acciona el bloqueo.
• Realiza las pasadas con ritmo uniforme.
• Comprueba el labrado que has realizado a máquina parada.

Las máquinas portátiles de lijado son las lijadoras de banda, las lijadoras rotoorbitales y las orbitales, no son las únicas pero, sin duda, son las más utilizadas. La elección de una u otra dependerá de las características del trabajo a realizar pudiendo emplearlas de forma simultánea. Las máquinas lijadoras no son consideradas peligrosas y los accidentes se reducen a leves rasguños producidos por la hoja de lija. La técnica de manejo vamos a establecerla diferenciándola por tipo de máquina:

• Lijadora de banda, como sabes consta de una banda de lija sin fin que discurre en movimiento giratorio entre dos rodillos, es muy utilizada en el lijado de elementos de carpintería por su gran capacidad de abrasión, las fases de trabajo que te secuenciamos son:
  • Comprueba la banda de lija, cámbiala si se encuentra embotada o desgastada o no tiene el grano adecuado a las características del lijado.
  • Para sustituirla, comprueba el sentido de las flechas impresas en la banda de lija, te indica la posición de trabajo y debe de coincidir con el giro de la máquina.
  • Acciona la palanca que retrae el rodillo delantero para destensar la banda, una vez sustituida la banda acciona la palanca para tensarla y gira manualmente la banda para centrarla.
  • Fija o sujeta las piezas a lijar.
  • Posiciona la máquina en la superficie a lijar y comprueba que no tiene el bloqueo del gatillo antes de su conexión a la red, pues la máquina saldría lanzada a gran velocidad.
  • Sujeta fuertemente la máquina con las dos manos y controla los movimientos en el lijado, no hagas presión, la máquina debe funcionar con la presión de su propio peso.
  • Si compruebas que la banda de lija no sigue centrada actúa girando la manilla de alineación del rodillo.

  • Trabaja en el lijado a favor de veta, y al acabar espera que se pare la máquina antes de soltarla.

• Lijadora rotoorbital, es la máquina que realiza lijados con menos imperfecciones, al igual que la orbital se utilizan en lijado de prototipos en crudo y en lijados de superficies con material de acabado, las más habituales son las que tienen el plato de 150 mm de diámetro, debes tener presente las siguientes fases en su manejo:

  • Comprueba el disco de lija, lo debes de sustituir si se encuentra embotado o su grano no es adecuado al trabajo a realizar, la sustitución es muy sencilla, generalmente van con el sistema de unión llamado velcro, debes fijarte en las perforaciones que incorporan haciéndolas coincidir con las del plato.
  • Posiciona la máquina en la superficie a lijar y conéctala a la red, comprueba el bloqueo del gatillo para evitar su puesta en marcha involuntaria.
  • Maneja la máquina posicionando la mano de accionamiento en la empuñadura trasera y la mano libre apóyala en la empuñadura delantera, algunas máquinas están preparadas para manejarlas con una sola mano.
  • Trabaja con movimientos uniformes y no inclines la máquina, pues dañarás con facilidad el disco de base, ni hagas excesiva presión.
  • Al acabar, espera que se pare la máquina antes de soltarla, no dejes que vibre libremente puede producir marcas en la superficie de lijado.

Lijadora orbital, al igual que la rotoorbital se utiliza en lijado de prototipos en crudo y en lijados de superficies con material de acabado, las más habituales son las que tienen el plato de 120 mm de ancho, se utilizan rollos de lija en soporte de tela de diferente grano, que cortamos a las dimensiones de la longitud del plato, dicha longitud es variable dependiendo del modelo y fabricante de la máquina, las lijas también se comercializan en soporte velcro, aunque en las orbitales no está tan extendido su uso como en las rotoorbitales, para su manejo debes seguir las siguientes fases:

• Comprueba la hoja de lija, debes sustituirla si se encuentra embotado o su grano no es adecuado al trabajo a realizar, la sustitución es muy sencilla, utilizas la desgastada como medida y cortas del rollo una nueva, la fijas en un extremo del plato con el accesorio de sujeción, a continuación tensas la hoja y la fijas en el otro extremo procurando que vaya alineada al plato.
• Posiciona la máquina en la superficie a lijar y conéctala a la red, comprueba el bloqueo del gatillo para evitar su puesta en marcha involuntaria.
• Maneja la máquina posicionando la mano de accionamiento en la empuñadura trasera y la mano libre apóyala en la empuñadura delantera.
• Trabaja con movimientos uniformes y no inclines la máquina, se daña con facilidad la base, ni hagas excesiva presión.
• Observa el proceso de lijado y comprueba que no presenta el defecto de lijado clásico de las lijadoras orbitales, las marcas en forma de remolinos.
• Al acabar, espera que se pare la máquina antes de soltarla, no dejes que vibre libremente puede producir marcas o arañazos en la superficie de lijado.

Sabes que el polvo son partículas sólidas finísimas suspendidas en el aire, de todas las partículas de polvo, las que suponen un riesgo, son las que puedes inhalar mientras estás mecanizando los materiales, recuerda que la inhalación de dicho polvo supone un riesgo, aunque un porcentaje elevado permanece en la nariz, otro porcentaje pasa a los bronquios y las partículas más finas pueden penetrar en los pulmones, con el consiguiente riesgo para la salud, ten en cuenta que en el proceso de lijado es en el que se produce más polvo, por lo que deberás usa la mascarilla específica correspondiente.

Son las máquinas portátiles más comunes, ¿quién no ha utilizado alguna de ellas?, son de manejo muy fácil e imprescindible en el taller de prototipos, existiendo en el mercado de múltiples modelos y prestaciones.

Podrás diferenciarlas en dos grupos:

• Taladros con cable, varían en cuanto a potencia del motor, prestaciones de percusión, diámetro del portabrocas, cambios de sentido de rotación, velocidades de giro, accesorios de empuñado y tope de profundidad para su manejo debes de:
  • Seleccionar la broca adecuada al trabajo a realizar, comprobando su filo.
  • Fijar correctamente la broca en el portabrocas, auxiliándote de la llave adecuada (se imponen las de fijado automático.
  • En el caso de requerirlo, fija el tope de profundidad de taladrado y acciona el percutor.
  • Selecciona la velocidad de giro.
  • Pon en marcha el taladro y sujétalo firmemente de la empuñadura.
  • Para evitar desplazamiento de la broca en el inicio, es conveniente que marques el centro del orificio con un punzón o botador, dependiendo del material a taladrar.
  • No taladres con excesiva rapidez, deja que la broca expulse el material cortado.
  • Mantén una posición de trabajo firme, no te desplaces y sigue correctamente la dirección del mecanizado a realizar.

  • Deja que acabe de girar la máquina, no intentes pararla con la mano.

• 

  Taladros de batería, son actualmente las máquinas portátiles de mayor evolución en relación a su versatilidad, facilidad y prestaciones de trabajo. Las nuevas baterías de litio han incrementado sus prestaciones. Normalmente las utilizarás para dos operaciones: taladrar y destornillar.

  Para su manejo debes de seguir los siguientes pasos:

  • Comprueba el nivel de carga de la batería y ten cargada una segunda batería de recambio.
  • Selecciona la broca según el taladro a realizar o la punta de destornillar que ajuste mejor al tamaño y forma de la cabeza del tornillo.
  • Fija la broca o punta de destornillar al portabrocas, habitualmente a mano y contragiro.
  • Comprueba y selecciona el sentido y la velocidad de giro.
  • Posiciona el taladro en el lugar de trabajo.
  • Ponla en marcha accionando el gatillo.
  • En operaciones de destornillador, evita que la punta gire en la cabeza del tornillo, puedes redondear la muesca de la cabeza y tener dificultades para introducir o sacar el tornillo, así como dañar las puntas.
  • En operaciones de taladrado, puedes utilizar el cambio de giro para extraer la broca del taladro efectuado.

Las máquinas de fresado te permiten realizar molduras y rebajes con diversos perfiles y dimensiones, dependiendo de las características de la herramienta de corte denominada fresa.

En el mecanizado de elementos de prototipos se utilizan normalmente dos tipos de fresadoras, las de resorte y las fijas, su manejo y fases de trabajo son las mismas, por ello no en necesario diferenciarlas y la utilización de una u otra dependerá de las prestaciones de la fresadora y del mecanizado a realizar. Las fases que debes tener en consideración son las siguientes:

• Selecciona la fresa que requiera el mecanizado a realizar y colócala en el eje portafresas, bloquea el husillo y fíjala, las máquinas no tienen el bloqueo normalizado y verás que cada fabricante lo tiene establecido de manera diferenciada.
• Comprueba que la fresa no presenta deterioro en el filo.
• Determina la profundidad de mecanizado.
• En fresados con guía al canto, fija los parámetros antes de poner la máquina en marcha.
• En el mecanizado con fresas que incorporan guía con rodamiento, verifica que el perfil de tope o guía no presenta irregularidades que después se reproducirán en el mecanizado.
• Fija las piezas a mecanizar a una altura de trabajo que te sea cómoda para manejar la máquina.
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  Posiciona la máquina en la superficie a mecanizar y conéctala a la red, comprueba que no tiene puesto el bloqueo del interruptor para evitar su puesta en marcha involuntaria.
• Agarra fuertemente con las dos manos la máquina de las empuñadoras correspondientes, en algunas fresadoras, generalmente las fijas, no incorporan dichas empuñaduras por lo que deberás sujetarlas a la carcasa de la máquina.
• Realiza los mecanizados a ritmo uniforme, procura no detenerte en los movimientos, de hacerlo provocarás quemaduras, ten en cuenta que las fresas giran a velocidades muy elevadas de 15.000 a 25.000 revoluciones por minuto, no te detengas en el recorrido de trabajo si es posible.
• No fuerces la máquina, realiza cuantas pasadas necesites.
• Cuando acabes el recorrido de mecanizado, aprieta el interruptor de la máquina y espera a que pare la fresa de girar para levantarla, especialmente si son de resorte.

La máquina fresadora de juntas, llamada popularmente galletadora, la utilizarás para realizar rebajes para juntar y ensamblar elementos o piezas de madera, la herramienta de corte es una fresa muy pequeña con la punta de los dientes en carburo de tungsteno, su funcionamiento es de desplazamiento de la carcasa del motor con la fresa hacia la pieza a mecanizar, al dejar de presionar en el avance lleva un mecanismo de resorte que hace retroceder la carcasa con el disco a la posición de inicio de mecanizado.

¿Sabes qué tipo de elementos se utilizan en la unión de las piezas? utiliza unas piezas planas ovaladas de diferentes tamaños, llamadas pastillas o popularmente galletas, de madera de haya comprimida, que ajustan perfectamente en la ranura de encaje realizada por la fresa de corte, al encolar con colas de acetato de polivinilo, cola blanca, la madera se hincha haciendo presión en las paredes de la ranura fijando la unión rápidamente.

Para mecanizar correctamente con la fresadora de juntas o galletera, ten en sigue las siguientes fases:

• Comprueba el estado de la herramienta de corte, si está deteriorada sustitúyela por otra.
• Selecciona la profundidad de mecanizado, generalmente depende del grueso del tablero o piezas a unir, dicha profundidad la determinarás en el selector que incorporan las máquinas y que generalmente coincide con la numeración que llevan las galletas.
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  Marca los centros del mecanizado en todas las piezas.
• Inmoviliza las piezas en el banco, a una altura que te resulten cómodas para el manejo de la máquina.
• Coloca la guía de la máquina para centrar los mecanizados y posiciona la máquina.
• Conecta la máquina a la red eléctrica y accionas el interruptor de puesta en marcha.
• No inicies el acercamiento de la fresa hasta que no esté en funcionamiento.
• Cuando haga tope de profundidad déjala retroceder con el mecanismo de resorte, acompaña su retroceso sin forzar ni mover la máquina.
• Espera a que haya retrocedido la herramienta de corte al final del recorrido, para mover la máquina.
• En el mecanizado, la viruta sale despedida violentamente por una abertura lateral, si es posible acopla el elemento de extracción centralizada o, en su defecto, utiliza el contenedor que facilita el fabricante.

En el taller de prototipos vas a conocer el manejo de las máquinas de forma individualizada, así el taller de prototipos estará equipado con: sierra de cinta, escuadradora, cepilladora, regruesadora taladro horizontal, escopleadora de cadena, lijadora de rodillo, tupí, torno de puntos manual y prensa, con el tipo de máquinas descritas, podrás realizar operaciones de aserrado, calibración de piezas, mecanizado para unión y ensamblado, perfilado moldurado, prensado, torneado y lijado, operaciones que se pueden considerar suficientes a la hora de fabricar un prototipo.

Debes tener en consideración las siguientes normas de carácter general en el uso de máquinas convencionales:

Antes del mecanizado:

• Comprueba la herramienta de corte, en el caso de verificar que su filo no está en buenas condiciones, lo aconsejable es que procedas a su sustitución.
• Selecciona o posiciona el elemento de protección adecuado al mecanizado a realizar.
• Abre la aspiración centralizada, en caso de no estar en marcha acciona su puesta en marcha.
• Coloca los materiales a mecanizar lo más cerca posible de la posición de trabajo.
• Posiciona el cuerpo correctamente, cada tipo de máquina y mecanizado requiere una posición de trabajo que te facilitará su realización, la postura del cuerpo más habitual es la del pié izquierdo más avanzado que el derecho, debes de saber que la mayoría de las máquinas están preparadas para ser manejadas por personas diestras y por ello las posiciones de trabajo no las puedes considerar fijas.
• Repasa las normas básicas de seguridad especificadas en cada máquina y utiliza los elementos de protección personal indicados.
• Puesta en marcha.

Durante el mecanizado:

• Apoya correctamente las piezas en la mesa de trabajo, en piezas largas auxíliate de soportes.
• Respeta el límite de las dimensiones de las piezas a mecanizar.
• Mantén la posición de trabajo en el manejo de la pieza, no te desplaces con la pieza mecanizada.

Después del mecanizado:

• Deja la máquina parada sin giros de motor.
• Cierra la aspiración centralizada.
• Retira restos y material mecanizado.

La sierra de cinta sin fin es una de las máquinas tradicionales de los talleres de prototipos, la capacidad de corte de piezas de considerables dimensiones y la posibilidad de realizar cortes curvados, hace que sea una máquina imprescindible. La técnica de manejo que requiere la puedes sintetizar en las fases siguientes:

• Comprueba, que la cinta está en buen estado, no presenta fisuras y los dientes no están embotados, en el caso de verificar que la cinta no está en buenas condiciones, lo aconsejable es que procedas a su sustitución, es muy útil plegar las cintas de sierra en círculos.
• Verifica que la hoja está bien situada en los volantes y con la tensión adecuada.
• Regula el protector de cinta según exija el mecanizado.
• Fija la altura de la guía de cinta principal según la medida del espesor de corte.
• Pon en marcha de la máquina y aspiración centralizada.
• Durante el aserrado es importante que respetes las siguientes normas:
  • Apoya correctamente la pieza en la mesa de trabajo.
  • En cortes al hilo y de medida estable utiliza la guía ajustable a la medida de corte de las piezas, no introduzcas la mano para empujar entre la guía y la sierra, utiliza una pieza sobrante o empujadores de seguridad, en el caso de cortar piezas al hilo es muy conveniente introducir una cuña al inicio del corte entre la piezas cortadas para evitar el cierre del corte, con lo que lograrás que la cinta circule sin roces en los lados de las piezas que vas cortando.
  • Una vez iniciado el corte y te encuentres con dificultad en continuar con el aserrado, acciona el interruptor de emergencia, no intentes sacar la pieza sin estar parada la máquina, puedes sacar la cinta del apoyo en los volantes.
  • En el caso de que se produzca la rotura de la cinta, acciona el interruptor de emergencia y aléjate hasta que esté completamente parada la máquina.
  • En cortes de piezas cilíndricas tienes que evitar que giren en el proceso de aserrado, sujétalas firmemente y utiliza piezas auxiliares para que el apoyo sobre la mesa sea correcto.

  • En cortes curvados procura no forzar la hoja para ganar el radio de la curva, es mejor que realices los cortes curvados en partes, separadas con cortes más o menos perpendiculares.

• Después del aserrado, no dejes restos de material encima de la bancada o alrededor de la máquina, utiliza el contenedor de restos para depositarlos y limpia la máquina.

• Una vez hayas accionado el interruptor de parada, aprieta el freno de pié para dejar la cinta sin movimiento y cierra la aspiración.
• Si al acabar el trabajo destensas la sierra, costumbre arraigada en los talleres al finalizar la jornada de trabajo, coloca la señal de aviso de peligro de sierra destensada.

Recuerda que la sierra circular o escuadradora es una máquina que ha ido evolucionando conforme se ha ido generalizando el consumo de derivados de la madera en forma de tableros o paneles de tamaño considerable y de medidas normalizadas, la incorporación del carro deslizable en paralelo al disco de corte, te facilitará el despiece de tableros manufacturados con precisión y sin esfuerzo.

¿Cómo manejo la escuadradora?, a continuación se describen las secuencias que debes respetar para manejar la escuadradora:

• Comprueba que el disco de corte sea el adecuado al material a mecanizar, no presenta embotamientos ni fisuras, y los dientes están en buen estado, si compruebas que el disco no está en buenas condiciones de uso o es inapropiado al material a cortar, es mejor que procedas a su sustitución, para ello, sigue las instrucciones descritas en la documentación de la máquina. Cada máquina tiene el bloqueador de eje diferenciado y su accionamiento es específico, la sustitución del disco es una operación muy sencilla: una vez que bloquees el eje, con la llave apropiada al tamaño de la tuerca-arandela de sujeción del disco la aflojas y extraes el disco, colocas el nuevo observando la dirección de giro, aprietas la tuerca y desbloqueas el eje, recuerda utilizar guantes de protección.
• Verifica la altura de corte según el espesor del material a cortar, habitualmente la referencia de altura es la que te deja ver tres dientes por encima del espesor de corte, la subida y bajada del disco puede accionarse mediante mecanismo manual o motorizado.
• Regula el protector del disco según el espesor del material, en el corte de tableros manufacturados regula también el disco incisor.
• Fija la medida de corte, la máquina te ofrece dos posibilidades: la medida en el carro deslizable o en la mesa fija con la guía lateral, dependiendo del corte a realizar utilizaras un lado u otro de referencia de medida de corte.
• Repasa mentalmente si has realizado todos los ajustes antes de la puesta en marcha.
• Pon en marcha la máquina y aspiración centralizada.
• Durante el manejo de la máquina debes respetar las siguientes normas:
  • Evita que se muevan los materiales a mecanizar una vez iniciado el corte, peligro de lanzamiento.
  • Mantén la postura durante el mecanizado, cuando te muevas con el carro, lo haces regularmente sin movimientos bruscos, no dejes de fijar el material a cortar, la mano derecha debe de ir al final del material a cortar empujando y fijando el material, la mayoría de las máquinas incorporan equipamiento antirretroceso del material de apoyo en el carro.
  • En cortes de piezas de longitud considerable y de anchos menores a 60 centímetros, es mejor que utilices de apoyo y referencia de medida el lado derecho de la máquina haciendo tope el canto del material a cortar, con la guía deslizable de medida de la mesa fija.
  • En cortes de longitud de piezas utiliza siempre que puedas la guía de medida del carro deslizable.
  • Debes realizar un primer corte de saneo a los tableros a lo largo del canto, corte que utilizarás de referencia para el corte a medida de las piezas.
  • No intentes retirar material sobrante introduciendo la mano, utiliza el empujador u otro resto de material, y si el resto es muy pequeño y se ha introducido en la ranura entre la mesa y el disco es mejor que pares la máquina para retirarlo.
• Una vez finalizado el aserrado, no dejes restos de material encima de la mesa o alrededor de la máquina, utiliza el contenedor de restos para depositarlos y límpiala.
• Una vez hayas accionado el interruptor de parada, cierra la aspiración.

La cepilladora o planeadora es una máquina que realiza el trabajo de enderezar o planear dos caras secuenciadas de las piezas, caras que nos van a servir de referencia para el mecanizado en el resto de las máquinas.

¿Cómo manejas la cepilladora?, las secuencias que debes respetar para manejar la máquina con la técnica adecuada son:

• Comprueba que el filo de las cuchillas de corte no está mellado ni presenta embotamientos de resina, si observas que las cuchillas no están en buenas condiciones de uso, es mejor que procedas a su sustitución, para ello, sigue las instrucciones descritas en la documentación de la máquina, tienes que saber que cada máquina tiene el bloqueador de eje diferenciado y su accionamiento es específico, la sustitución de las cuchillas es una operación que requerirá tu máxima atención, y básicamente deberás seguir las siguientes instrucciones: una vez que bloquees el eje, vas aflojando las cuchillas una a una, y las extraes, realiza la operación con precaución, pues en el interior de la abertura de alojamiento de la cuchilla se alojan unos muelles que empuja la cuchilla al exterior, colocas la nueva cuchilla observando que el bisel lo sitúas opuesto a la dirección de giro, da el saliente adecuado a la cuchilla, para ello utiliza los niveladores de cuchillas independientes de la máquina, la referencia que utilizan los niveladores son variables: unos utilizan el propio eje portacuchillas y otros la pletina de salida, aprietas las tuercas, desbloqueas el eje y lo posicionas para el cambio de otra de las cuchillas, debes de cambiar todas, recuerda el utilizar guantes de protección.
• Verifica la profundidad de corte según el material a cepillar, la subida y bajada de la mesa o pletina de entrada es la que regula la profundidad.
• Regula el protector según el espesor y las características del material a mecanizar.
  
• Fija la medida del paralelograma o guía, dependiendo de las dimensiones de la superficie a planear.
• Repasa mentalmente si has realizado todos los ajustes antes de la puesta en marcha.
• Pon en marcha la máquina y aspiración centralizada.
• Durante el manejo de la máquina debes respetar las siguientes normas:
  • Mantén la postura en el trabajo, es muy importante que no te desplaces al empujar las piezas, dicho empuje lo haces regularmente sin movimientos bruscos, no dejes de fijar el material a las pletinas, la mano izquierda la sitúas delante y la derecha la posicionas detrás, con ambas manos vas empujando y ejerciendo presión para vencer la resistencia de las cuchillas, primero cepillarás la cara de la pieza y después el canto utilizando la cara como referencia de apoyo al paralelograma.
  • En el mecanizado de piezas en dimensiones muy pequeñas utiliza útiles apropiados para realizar el mecanizado, evita pasar piezas menores de 30 centímetros de largo sin dichos útiles.
  • Antes de iniciar el mecanizado, observa si las piezas tienen defectos que te resulten incómodos o te dificulten su mecanizado, en piezas que veas que tienen defectos de nudos, gemas, entre otros, cepilla la cara y canto que con menos pasadas llegues a conseguir su planeado, en las piezas que estén curvadas, debes apoyar la parte cóncava para su planeado, dejando la rectificación de la cara convexa en el regruesado.
• Una vez finalizado el trabajo, acciona el interruptor de parada, comprueba que el protector cubre todo el eje portacuchillas y cierra la aspiración.

La regruesadora es una máquina que realiza el labrado de la madera consiguiendo el grueso de las piezas a la medida requerida, el trabajo de pasar a grueso las piezas es posterior al cepillado, tomando como referencia las superficies planeadas de las piezas.

¿Cómo manejar la regruesadora?, debes respetar unas secuencias para manejar la regruesadora con la técnica adecuada:

• Comprueba que el filo de las cuchillas de corte está en condiciones de uso, de lo contrario procede a su sustitución, siguiendo las instrucciones descritas en la documentación de la máquina, el eje portacuchillas es similar al de la cepilladora requiriendo las mismas operaciones, la única diferencia está en el nivelador para determinar el saliente adecuado a la cuchilla, para ello utiliza el propio eje portacuchillas como referencia y recuerda el utilizar guantes de protección.
• Verifica la profundidad de corte según el material a cepillar, la subida y bajada de la mesa inferior es la que regula la profundidad, para ello mide la pieza antes de introducirla en la máquina, y calcula la diferencia entre la medida de la pieza y la medida de regrueso, si la medida es mayor de 4 o 5 milímetros debes modificar la medida y realizar el regrueso en dos pasadas.
• Regula la medida de regrueso, comprueba la medida marcada en la escala milimetrada de subida y bajada de la mesa inferior.
• Fija la medida de regrueso.
• Repasa mentalmente si has realizado todos los ajustes antes de la puesta en marcha.
• Pon en marcha la máquina: selecciona la velocidad de avance de las piezas, normalmente dos posiciones, acciona el interruptor de marcha y abre la aspiración centralizada.
• Durante el manejo de la máquina debes respetar las siguientes normas:
  • Mantén la postura en el trabajo, evita colocarte en la misma dirección de introducción de las piezas, puede salir alguna pieza lanzada, al posicionar las piezas en la mesa debes hacerlo perpendicular a los rodillos de avance, evita que apoyen en restos del labrado, primero debes mecanizar la medida de mayor dimensión de la pieza y después la menor, puedes introducir varias piezas a la vez si previamente tienen las mismas dimensiones, lo habitual es realizar el regrueso introduciendo una tras la otra sin dejar espacio entre ellas, el rodillo de arrastre trabaja sin brusquedades.
  • En el mecanizado de piezas en dimensiones muy pequeñas utiliza útiles apropiados para realizar el mecanizado, estos útiles te permiten fijar varias piezas alargando la medida a regruesar, evita el pasar piezas sin estos útiles menores de 30 centímetros de largas, de hacerlo es posible que se bloqueen entre los rodillos con el consiguiente desperfecto en la pieza.
  • Mientras la máquina labra la madera, debes situarte en la parte trasera de la máquina para retirar la pieza, evitarás que caiga al suelo.
  • Una vez finalizado el trabajo, acciona el interruptor de parada y cierra la aspiración.

La tupí es una de las máquinas tradicionales de los talleres de prototipos por sus múltiples aplicaciones, la utilizarás para operaciones de ranurado, moldurado, ensamblado y perfilado, todos estos trabajos es posible realizarlos con solo cambiar la herramienta de corte llamada fresa.

La técnica de manejo que requiere la tupí máquina, se sintetiza en las siguientes fases:

• Comprueba que la máquina tiene accionado el interruptor de seguridad antes de proceder a colocar la fresa, en algunas máquinas, el interruptor de seguridad se activa al manipular la carcasa de acceso al eje, impidiendo la puesta en marcha accidental.
• Abre los elementos de protección de acceso al eje.
• Bloquea el eje y afloja el tornillo de fijación de la fresa.
• Retira los anillos superiores y saca la fresa del eje, guárdala en el lugar habilitado.
• Coloca la fresa, situándola lo más abajo posible del eje, introduce los anillos necesarios hasta llegar al final con el anillo tapa de cierre para fijarlos con el tornillo al eje.
• Sitúa el paralelograma o guía y los elementos de protección adecuados al mecanizado.
• Verifica que la fresa no roza en ningún elemento haciéndola girar manualmente.
• Selecciona la velocidad de rotación adecuada a la fresa, recuerda que la velocidad va impresa en la propia herramienta.
• Regula los parámetros de mecanizado: profundidad de fresado o de corte, altura de fresado y elementos de protección.
• Fija el eje para impedir su movimiento horizontal.
• Repasa mentalmente si has realizado todos los ajustes antes de la puesta en marcha.
• Posiciona el material a mecanizar, en piezas de considerable longitud utiliza rodillos de apoyo.
• Pon en funcionamiento la máquina y aspiración centralizada.
• Durante el mecanizado es importante que respetes las siguientes normas:
  • Mantén la postura en el trabajo, evita siempre desplazarte al empujar las piezas, con la mano izquierda fija la pieza fuertemente por el extremo ya mecanizado, con la mano derecha empuja y posiciona la pieza haciendo presión hacia la mesa y el paralelograma.
  • Apoya la pieza en la mesa de trabajo y en el paralelograma, no cojas partículas del mecanizado entre la pieza y la mesa.
  • Introduce adecuadamente la pieza al inicio del mecanizado, es importante en trabajos de moldura o galce recortado utilizar el protector de tope al de rechazo de la pieza.
  • Utiliza siempre que sea posible el alimentador de rodillos, selecciona la velocidad de avance, normalmente posiciones 1 ó 2, dependiendo de las características del mecanizado.
  • Mecaniza piezas a tope de árbol colocando rodamientos de profundidad de corte.
  • Espiga utilizando siempre el carro para ello.
  • Evita el pasar piezas pequeñas que te dificulten su sujeción.
  • Una vez finalizado el mecanizado, acciona el interruptor de parada y cierra la aspiración.

Existen dos máquinas claramente diferenciadas para realizar el escopleado y mortajado de la madera:

• La escopleadora de cadena.
• La taladradora horizontal.

¿Cómo manejar la escopleadora de cadena? , a continuación se describen las secuencias que debes seguir para manejar la escopleadora:

• Comprueba que la cadena es la adecuada al trabajo a realizar y está en condiciones de uso, en caso contrario debes proceder a su sustitución siguiendo las instrucciones descritas en la documentación de la máquina, y que básicamente son las siguientes: levanta la carcasa que cubre la cadena, acciona el interruptor de seguridad, afloja el tornillo de sujeción del espadín, desplaza el espadín para destensionar la cadena, retírala y coloca la nueva introduciendo los eslabones de la cadena en el engranaje dentado motriz, fijas el tornillo de sujeción del espadín suavemente, tensionas la cadena y aprietas el tornillo de sujeción.
• Gradúa la profundidad de la escopleadura.
• Regula la medida lateral de la escopleadura.
• Fija la pieza entre los soportes de la mesa.
• Repasa mentalmente si has realizado todos los ajustes antes de la puesta en marcha.
• Ponla en marcha tirando de la palanca de bajada de la cadena.
• Durante el manejo de la máquina debes respetar las siguientes normas:
  • Mantén la postura en el trabajo, no bajes la cadena con brusquedad, introdúcela en la pieza suavemente.
  • En escopleaduras de mayores dimensiones que la medida de la cadena, desplaza lateralmente la mesa e introduce nuevamente la cadena hasta lograr la medida deseada.
  • Sube la cadena tirando de la palanca al final del recorrido, la máquina se parará automáticamente.
• Una ves finalizado el mecanizado , retira los restos del mecanizado, la aspiración centralizada en éste tipo de máquinas no está muy lograda.

¿Cómo manejas la taladradora horizontal?, a continuación se describe la secuencia que debes seguir para mecanizar con la taladradora y que responden a la pregunta:

• Comprueba que la broca es la adecuada al trabajo a realizar y está en condiciones de trabajo o procede a su sustitución siguiendo las instrucciones descritas en la documentación de la máquina, y que básicamente son las siguientes: bloquea el eje de giro, con la llave apropiada afloja la mordaza de sujeción de la broca, la extraes e introduces la correcta fijándola apretando las mordazas con la misma llave, desbloqueas el eje y la haces girar manualmente para comprobar si se ha sujetado centrada.
• Gradúa la profundidad de la escopleadura y la altura, no olvides que las máquinas de escoplear son muy diferentes y su regulación dependen del modelo y fabricante.
• Fija la pieza encima de la mesa con el husillo correspondiente, habitualmente prensores neumáticos.
• Repasa mentalmente si has realizado todos los ajustes antes de la puesta en marcha.
• Pon en marcha de la máquina.
• Durante su manejo debes respetar las siguientes normas:
• Mantén la postura en el trabajo, no introduzcas la broca con brusquedad, introdúcela en la pieza con dos o más empujes, extrayéndola para permitir la expulsión de los restos del mecanizado, operación, especialmente aconsejable en el mecanizado de maderas duras.
• Las escopleaduras las debes realizar haciendo agujeros secuenciados hasta lograr la medida marcada, a continuación vas recorriendo el carro con la broca introducida hasta dejar las paredes paralelas.
• Una vez finalizado el trabajo, acciona el interruptor de paro y retira los restos del mecanizado, la aspiración centralizada en éste tipo de máquinas no está muy lograda.

Lo emplearás cuando en el diseño del prototipo hayas introducido algún elemento torneado, el que se utiliza en la fabricación de elementos torneados para prototipos es el llamado de puntos de accionamiento manual.

Consta de una bancada en cuyos extremos se encuentra el cabezal motriz, dotado de un juego de poleas para permitir diversas velocidades de giro. Actualmente la mayoría de los tornos van equipados con variadores electrónicos de velocidad con visores digitales para seleccionar la velocidad de trabajo, oscilando normalmente entre 650 y 3800 rpm y el carro móvil con el punto de centrado, para deslizarlo sobre la bancada posicionándolo según la longitud de las piezas a tornear.

Según sea el trabajo que tienes que realizar, dispones de dos opciones de posicionamiento de las piezas:

• Fijar la pieza en el cabezal motriz con el plato plano o en el plato de garras, para torneados frontales.
• Fijar la pieza entre el cabezal motriz y el punto de centrado, para torneados longitudinales.

¿Cómo manejar el torno?, las secuencias que debes respetar para manejar el torno son : Comprueba que la velocidad de giro es la adecuada al torneado, en caso contrario cambia la correa de posición en la polea, a piezas de diámetros mayores menores velocidades de rotación.

• Gradúa la longitud del torneado, deslizando el punto, secuencia que no es necesaria en torneados sobre el plato plano y plato de garras.
• Prepara la pieza a tornear, marca los centros de los ejes en los dos extremos de la pieza trazando diagonales.
• Fija la pieza entre el punto estrellado motriz y el punto soporte, en el plato plano centra la pieza y fíjala con tornillos introduciéndolos entre los diferentes orificios que este lleva, en el plato de garras introduce el extremo de la pieza y aprieta las garras con la llave, es conveniente que realices unos giros manualmente para comprobar el centrado de las piezas.
• Posiciona el soporte de herramienta lo mas cercano posible a la pieza a tornear y ligeramente por encima del centro de rotación de la pieza.
• Repasa mentalmente si has realizado todos los ajustes antes de la puesta en marcha.
• Pon en funcionamiento el torno accionando el interruptor.
• Durante el manejo del torno debes respetar las siguientes normas:
  • Mantén la postura en el trabajo, selecciona la herramienta y apóyala sobre el soporte, sujétela firmemente sobre el soporte con una mano encima de la herramienta próxima al apoyo del soporte y la otra en el mango que es la mano que dirige el torneado.
  • Comienza a tornear con la gubia de desbastar hasta conseguir un cilindro regular, posteriormente selecciona la herramienta adecuada al perfil del torneado.
  • Antes de lijar el torneado retira el soporte de apoyo de herramienta, evitarás el peligro de atrapamiento de los dedos entre el torneado y el soporte.
  • Respeta el protocolo de seguridad y especialmente utiliza el protector de pantalla facial o gafas.
• Una vez finalizado el trabajo, acciona el interruptor de paro y retira los restos del torneado, la aspiración centralizada en éste tipo de máquinas no está muy lograda.
  

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