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Caso práctico
Como todas las semanas, se reúnen los miembros del equipo de trabajo de la empresa BK programación para comentar las incidencias de la semana anterior.
Esta semana tienen algo que celebrar ya que el proyecto de la panadería "Migas Amigas" está prácticamente listo y si lo entregan antes de la fecha límite, que es dentro de dos semanas, tendrán una bonificación ya que el gerente de la panadería quería que estuviera lista para la campaña navideña.
–¿Habéis verificado bien el código fuente con las herramientas de la W3C?–pregunta Ada a todos los presentes.
–Sí –contesta Antonio que continúa diciendo: –lo hemos validado para el XHTML 1.0 y las CSS3, y ya hemos añadido los iconos en el pie de página.
–Y ¿habéis verificado la accesibilidad?–vuelve a preguntar Ada.
–¡Pues claro! –le responde María, que continúa diciendo: –Hemos empleado las herramientas de verificación automática y –es Juan el que termina la frase– hemos revisado manualmente todos los criterios de éxito para que estuviera conforme con el nivel A. Estoy seguro de que conseguirá la subvención de su ayuntamiento.
Ada interviene preguntando: –¿Se la habéis dejado utilizar a alguna persona para ver si le resultaba fácil de usar?
–La verdad es que todos se la hemos enseñado a alguien para que nos diera su opinión. Yo en concreto se la enseñé a mi abuela que aunque todavía es joven no suele utilizar Internet muy a menudo y no tuvo ningún problema. Hasta me ha dicho que la avise cuando esté funcionando para poder escribirles con el formulario de contacto y encargar el roscón de Reyes –responde Ana.
–Habéis hecho un trabajo estupendo –les dice Ada y añade –y aún nos quedan dos semanas de plazo. ¿Creéis que se podría mejorar en estas dos semanas algo?
–Yo creo que sí –contesta Juan, que continúa diciendo: –Podríamos hacer la página más interactiva de modo que la experiencia del usuario sea más agradable. Aunque el formulario es accesible con el ratón y con el teclado y está preparado para las ayudas técnicas de las personas con discapacidad, podríamos controlar los eventos del usuario para que cuando éste pase por encima de algún enlace o algún elemento del formulario, o cuando un elemento se active, haya una cambio más evidente del que hay ahora. Y lo podemos hacer complementado la hoja de estilos y añadiendo algo de código con Javascript para controlar los eventos de los elementos. Sí, ya sé, no me mires de esa manera –Juan observa que Ada lo está mirando – ya se que hay que separar el contenido del aspecto y del comportamiento. No te preocupes, el script se puede vincular al documento igual que las hojas de estilo y después validaremos todo de nuevo.
–¿Qué pasa si un usuario no tiene activado el Javascript? –pregunta Carlos.
–Si se hace todo como dice Juan el único problema que tendrá ese usuario es que se perderá esa experiencia, porque el resto de la funcionalidad de la página permanecerá intacta ¿No es así Juan? –responde Ada, y como todas las semanas da por terminada la reunión diciendo: –Pues a trabajar todos.
Juan es un experto en desarrollo de aplicaciones informáticas y aplicaciones 
