La cuarta noria de evacuación hace referencia al movimiento de pacientes entre hospitales. Generalmente esta evacuación se pospone un tiempo, y suele deberse a necesidades particulares en la atención que requiere el paciente. Por ejemplo, una víctima de un incendio, que inicialmente ha sido evacuada al hospital más cercano, y que una vez asistida inicialmente, los especialistas consideran que debe ser trasladada a un centro especializado en quemados, donde cuentan con medios más específicos para su tratamiento. Del mismo modo podría aplicarse a pacientes con otras necesidades específicas. Además podría necesitarse el traslado debido a que el propio hospital esté saturado y que no pueda garantizar una atención adecuada, por la masiva recepción de víctimas.
En definitiva, la cuarta noria consiste en la evacuación de pacientes entre centros médicos por criterios de especialización, sobrecarga o agotamiento de posibilidades terapéuticas. Es lo que se denomina transporte interhospitalario o transporte secundario. Se suelen utilizar medios aéreos o terrestres medicalizados.