En el vídeo se ve a un hombre abriendo una gasa triangular grande para realizar un cabestrillo. Otro hombre está sentado en una silla. El socorrista hace que el herido apoye su mano en la clavícula contraria. A continuación apoya uno de los picos de la gasa sobre la mano. Coloca el paño adaptado al brazo pasándolo por debajo del mismo hasta llegar al codo. Ahí se recoloca el pañuelo ajustándolo al codo y pasando el otro extremo de la gasa por detrás de la espalda y anudándola sobre el hombro contrario. El pico que queda a la altura del codo se anuda para que no sobresalga.