Referencias anatómicas del oído externo.

Caso práctico

CASO. ¿En qué te fijas cuando observas a una persona?, le preguntaron a Pablo. En muchas cosas contesto él, pero desde que me dedico a la Audiología Protésica pongo bastante atención a las orejas, ahora sé por qué tiene esa forma, conozco las partes que las componen, sus pliegues, imagino como sería la impresión del oído; incluso en la actualidad con mis pacientes soy capaz de prever como le quedaría un molde u otro, cuando inspecciono la oreja antes de realizar la otoscopia. Al final acabas por encontrar similitudes entre unos oídos y otros, aunque cada uno con sus particularidades, como una huella digital, que te permiten conocer de antemano que problemas pueden surgir al realizar el molde.

RELACIÓN ENTRE EL OÍDO EXTERNO Y EL MOLDE ADAPTADOR.

Debes conocer la anatomía y las características del oído externo para una mejor comprensión de los diferentes tipos de molde y para entender la interacción entre el conducto auditivo externo y el molde, así como para identificar posibles factores de retroalimentación acústica.

El oído externo consta de dos partes, una externa, llamada pabellón auricular y una interna, continuación de la anterior, llamada conducto auditivo externo (C.A.E.)

  • Pabellón auricular. Presenta gran cantidad de pliegues y depresiones que le proporciona un aspecto muy irregular y característico. Las más destacadas son la concha auricular, el trago, el antitrago, el hélix, el antihélix, y el lóbulo.
  • Conducto auditivo externo. No es regularmente cilíndrico, sino algo aplanado de adelante hacia atrás, con una longitud promedio de 35 mm. Tiene forma de S con dos curvaturas bien marcadas, que le dan un patrón único pero asociable de un oído a otro.

Las curvaturas que muestra el conducto auditivo externo lo dividen en tres áreas:

  • Una parte externa, entre la base de la concha auricular y la primera curvatura del conducto.
  • Una parte media, entre la primera y la segunda curvatura del conducto.
  • Una parte interna, comprendida entre la segunda curvatura del conducto auditivo externo y la membrana timpánica.

Las partes externa y media son fibrocartilaginosas, constituidas exclusivamente por partes blandas, mientras que la parte interna es ósea y está excavada en el hueso temporal.

  • La porción fibrocartilaginosa está cubierta en su cara interior por un revestimiento cutáneo notable y posee una capa subcutánea bien desarrollada. Se caracteriza por ser flexible y moderadamente sensible, lo cual permite mantener la comodidad del paciente a pesar de su estiramiento cuando se introduce el molde. Está sujeta a cambios de su forma como resultado de los movimientos de la mandíbula durante la masticación y el habla.
  • La porción ósea está cubierta interiormente por una capa muy delgada de piel (de aproximadamente 0,2 mm de espesor) y no presenta capa subcutánea. Se caracteriza por ser rígida, altamente vascularizada y muy sensible. Un molde que ajuste demasiado en esta zona puede resultar molesta su utilización.

El conducto auditivo externo es una cavidad del oído externo cuya función es conducir el sonido desde el pabellón auricular hasta el tímpano.

Este fenómeno se produce cuando la señal emitida por el auricular del audífono se transmite hacia el exterior (a través de la ventilación o por un mal ajuste del molde sobre el oído) y es captada de nuevo por el micrófono del audífono, lo cual se percibe como un ‘pitido’ o acoplamiento. También se conoce como ‘feedback’ o ‘efecto Larsen’.