Variables externas III.

Ambiente escolar.
Esta es otra de las variables a tener en cuenta para entender la sordera y el desarrollo de la persona. Son dos los principales aspectos a tener en cuenta:

  • Estimulación y educación temprana recibida. Es decir la calidad y adecuación de la estimulación educativa que ha tenido en sus primeros años de vida y el grado de aprovechamiento que el sujeto ha hecho.
  • Sistemas de escolarización. El tipo o modalidad educativa que ha recibido, si ha sido (o está siendo) en un centro de educación especial o centro de integración, si la metodología fue solo en lengua oral (oralista), o en lengua oral y lengua de signos (bilingüe).

Atención profesional recibida en los primeros años de vida (hasta los seis años de edad). En las niñas y niños sordos esta atención profesional suele ser principalmente de tipo logopédico.

Con este término nos referimos al tipo de colegio o escuela, si es un colegio específico para sordos (educación especial) o de integración (colegio ordinario).

Tipo de educación que se dirige a alumnos con necesidades educativas especiales. Los colegios educación especial para sordos suelen acoger solo a alumnado sordo.

Es aquel colegio en la que existe alumnado con discapacidad (en este caso auditiva) y alumnado sin discapacidad. Actualmente, por principio, todos los colegios ordinarios son, o pueden ser, de integración.

Para saber más

En este enlace encontrarás un documento en el que podrás ampliar información sobre el ambiente y las variables que inciden sobre la sordera de una forma amena y contextualizada

Reflexiona

RECUERDA QUE...Cada persona sorda es única e irrepetible. No todas las personas sordas son iguales ni tampoco sus tipos de sordera ya que confluyen en ella multitud de variables. Conocer estas variables internas y externas te darán una gran información para comprender otras características del paciente: restos auditivos, influencia de la familia, forma de comunicación de la que puedes echar mano a la hora de relacionarte con él, grado de interiorización de la lengua oral antes de la pérdida auditiva, calidad de la rehabilitación que ha tenido, etc. Pero, ten siempre en cuenta que, sobre una persona confluyen todas estas variables influyendo y/o dependiendo unas de las otras. Si, por ejemplo, una persona tiene una sordera postlocutiva tendrá ya una buena base para seguir desarrollando la lengua oral; a su vez estará teniendo mucha importancia el ambiente familiar y escolar que haya propiciado o no, dicho desarrollo; si a esto le añadimos la importancia del grado de pérdida auditiva, comprenderás lo acertado y justo que es referirnos a las PERSONAS SORDAS como UN COLECTIVO HETEROGÉNEO. ¡No lo olvides!