Localización de la lesión: según la parte del oído donde se produzca la lesión las sorderas se pueden clasificar en:

• • Conductiva o de transmisión: si la lesión es en el oído externo o medio. Este tipo de sorderas tienen un buen pronóstico ya que suelen ser leves o medias con lo que ello conlleva para su desarrollo vital y funcional. Hoy en día suelen tener tratamiento médico, quirúrgico y audioprotésico según los casos.
  • Perceptiva o neurosensorial: localizadas en el oído interno. Hoy día no tienen tratamiento médico o quirúrgico. El único tratamiento es audioprotésico según los casos. En caso de niños la intervención es más compleja por las implicaciones socioeducativas que pudiera tener.

• Mixta: cuando se produce en ambas zonas, es decir cuando la pérdida es tanto conductiva como neurosensorial.

Etiología (causa):

las sorderas se producen por diferentes causas. Como no es pertinente ver aquí todo el complejo desarrollo de la etiología de las sorderas, sí nos interesa una sencilla clasificación que implicará sobre todo a variables del entorno familiar:

• Sordera hereditaria: cuando la causa o el origen es genético o hereditario, es decir, transmitido por los progenitores.
• Sordera adquirida : cuando se produce en el embarazo (prenatal), durante el parto (perinatal) o después del nacimiento (postnatal).