Aceptación.

Reflexiona

“Tengo un hijo sordo, hay cosas que puedo hacer para ayudarle a ser una persona responsable.”

En este momento vuelven a enfrentarse con la realidad después de una serie de idas y venidas y aceptan la situación, lo que les vuelve a generar ansiedad.

En estos momentos los padres y madres empiezan “dejar de ocultar” el audífono de sus hijo e hijas y no intentan que pase desapercibido entre sus ropas o entre su pelo. Este es uno de los mejores indicadores que reflejan que se está empezando a aceptar la sordera: cómo usan el audífono. Una persona que (al margen de gustos estéticos) no oculta su audífono o el de sus hijos e hijas tendrá aceptada su sordera, mientras que unos padres que intentan que no se vea el audífono ocultándolo con pliegues o complementos en el vestuario serán, probablemente, personas que todavía no han logrado esta aceptación.

Como estás comprobando, una vez más la aceptación y el uso de la prótesis está muy relacionado con la aceptación que se tenga de la sordera en sí; por lo que trabajar un (buen) uso de la prótesis pasa por trabajar la aceptación de la sordera.

Es muy habitual también que en estos momentos los padres y madres empiecen a decir ante los demás que su hijo o hija es sordo. Lo habitual es que lo verbalicen y reconozcan primero ante su profesional de confianza para luego hacerlo ante otros familiares.

Aunque es esta ya una etapa bastante avanzada en el proceso, viene acompañada de ansiedad. No deja de ser un enfrentamiento más de la nueva realidad, aunque ya con bastante camino recorrido.

La etapa del Choque emocional y la de la Aceptación suelen ser relativamente breves que no suelen durar más de unas semanas.
Ilustración de la cabeza de una persona indicando el movimiento de cabeza para decir si.