Las prótesis fijas de metal-cerámica, son unas de las más utilizadas en la actualidad. Se trata de fundas y puentes que tienen el núcleo metálico, es decir, por dentro son de metal, y por fuera están recubiertas de cerámica o porcelana de un color similar al de los dientes del paciente. Lo que se consigue con el metal interno es aumentar la resistencia de las prótesis, Piensa que los dientes tienen una función principal masticatoria con la que se hace mucha fuerza, por tanto, las prótesis que se colocan encima de los dientes, deben ser muy resistentes.
Este tipo de prótesis fija de metal cerámica tiene dos inconvenientes principales:
- El primero es que el metal no deja traspasar la luz, es opaco. Una de las características de los dientes naturales es su translucidez, es decir, que dejan pasar la luz. Si colocamos al lado de un diente natural una funda de metal-cerámica, puede pasar, no tiene por qué, que se note la diferencia, ya que un diente es translúcido y el otro opaco. Por eso hoy en día han salido al mercado nuevos materiales que tratan de solucionar este problema estético que tienen las prótesis de metal-cerámica.
- El segundo de los
problemas que tienen las fundas de metal-cerámica es que, a la
larga, puede pasar que en el cuello del diente enfundado aparezca un
ribete negro. ¿No te ha ocurrido alguna vez ver a alguien
que sabes que lleva fundas porque le has visto un aro negro en el
cuello de los dientes? Pues a eso nos referimos. Ese ribete negro
puede verse por tres razones:
- La primera, porque la cerámica que cubre al metal de la funda no llegue a cubrirlo del todo, y haya parte del metal que se ve porque no está cubierto de cerámica.
- La segunda, porque en esa pieza dental se haya producido una reabsorción de la encía, es decir, que cuando se le colocó la prótesis, la encía cubría el cuello de la funda o puente, pero con el paso de los años, se le ha ido reabsorbiendo la encía hasta que el cuello de la prótesis ha quedado expuesto al exterior, con lo que deja visible una parte que debería estar tapada por encía. Y esa parte descubierta del cuello tiene tan poca cantidad de cerámica, que se trasparenta el metal.
- La tercera razón por la que se ve el ribete negro es porque se ha visto que el metal, con el paso del tiempo, tiñe la encía del cuello del diente, por lo que, sin necesidad de que el metal se vea, observamos la famosa línea oscura en el cuello de la funda.
