Es el aditamento en forma de muñón que se atornilla sobre el implante para después poder colocar la prótesis encima que irá cementada.
Los hay de diferentes tipos: de hexágono interno, de hexágono externo, octogonales, etc. Además los hay de diferentes inclinaciones ¿Por qué?
Un implante debe colocarse lo más paralelo posible a los dientes vecinos. Pero esto no siempre es posible. Si los pilares para cementar fuesen rectos, como una continuación del implante, podría surgir un problema: que la prótesis no entrase porque no existe paralelismo en el eje de entrada.
Observa este caso:
Aquí los dos implantes se han colocado paralelos entre ellos y con sus dientes vecinos. Por lo tanto, se pueden colocar unos pilares para cementar rectos (de color rojo en el dibujo). Como puedes ver, no hay ningún problema en el eje de entrada de la prótesis.
Aquí en cambio sí hay un problema:
Los implantes no están paralelos. Si el clínico colocase unos pilares para cementar rectos (color verde) el puente sobre implantes no entraría, ya que no existe paralelismo en el eje de entrada. Si en cambio se colocan unos pilares para cementar inclinados (de color rojo), se puede solucionar el problema del paralelismo en el eje de entrada.
Por lo tanto, existen muchos tipos de pilares para cementar, y la razón para que haya pilares inclinados es para corregir la angulación del implante por motivos estéticos o biomecánicos.
Continuemos viendo más aditamentos de implantes.