1.3.1.- Técnicas de hemostasia (II).

Ilustración en la que se observa el brazo de un hombre. Otra persona mantiene una mano presionando sobre la arteria humeral. Aproximadamente en la zona media de la cara interna del brazo. En la misma ilustración, debajo se ven como se presiona con la palma de la mano sobre la arteria femoral, aproximadamente en la zona de la ingle.

Imagina que estás atendiendo a un herido que presenta una hemorragia muy grave y las dos técnicas anteriores no han sido efectivas ¿Qué más puedes hacer para detener la hemorragia?

Si la hemorragia es severa o si pasados 10 minutos observas que la hemorragia continúa, debes actuar sobre el flujo sanguíneo.

  1. Buscar la arteria principal de la extremidad afectada y presionarla con los dedos a fin de reducir la hemorragia.
    1. En el brazo, presionar la arteria humeral o arteria braquial., que se encuentra en la cara interna del tercio medio del brazo. Esta presión disminuye la sangre en brazo, antebrazo y mano. Para aplicar la presión colocar cuatro dedos sobre la arteria y presionar sobre el hueso.
    2. En la pierna la presión se hace en la ingle, sobre la arteria femoral, comprimiéndola con el puño o canto de la mano. Esta presión disminuye la hemorragia en muslo, pierna y pie.
  2. Torniquete. El torniquete supone cortar la circulación sanguínea de la extremidad. Si la colocación del torniquete se prolonga pueden aparecer complicaciones como: Gangrena y amputación quirúrgica del miembro afectado. Por estas razones se desaconseja su uso salvo en los siguientes casos:
    1. Amputación traumática de la extremidad o parte importante de ella.
    2. Síndrome de aplastamiento.

Está claro que lo mejor es no poner nunca un torniquete pero si tienes que actuar en una de estas situaciones excepcionales. ¿Qué debes tener en cuenta al colocarlo?

  • La técnica para colocar el torniquete es la siguiente:
    • Utilizar una venda o tejido ancho, no inferior de unos 5 a 7 cm. de ancho. (Está desaconsejado el uso de alambres, cuerdas o tejidos estrechos).
    • Debe realizarse en el brazo o en el muslo, que al contar con un único hueso, permiten que la compresión sea más efectiva.
    • Dar dos vueltas alrededor de la extremidad, empezando de arriba hacia abajo y anudando arriba con un nudo sencillo.
    • Colocar un objeto rígido (palo, bolígrafo, etc.), sobre el nudo, fijándolo con dos nudos más.
    • Girar el objeto lentamente apretando el vendaje hasta frenar la hemorragia.
    • Fijar el objeto utilizado con una cinta adhesiva u otro material para no perder el efecto compresivo.
  • Precauciones al colocar un torniquete:
    • Cuando se coloca un torniquete hay que asegurarse de dejarlo siempre visible y anotar la hora exacta de su colocación. Se puede poner en la frente del herido con la T de torniquete delante.
    • Debe colocarse en la posición más cercana al punto de sangrado para limitar al máximo el daño a los tejidos adyacentes.
    • Si se ha puesto un torniquete NUNCA se debe aflojar, pues la razón que ha obligado a su colocación sigue existiendo y se corre el riesgo del paso de toxinas al organismo. Únicamente personal médico podrá retirarlo.

Se llama Gangrena a la necrosis y posterior descomposición de tejidos orgánicos causada por infección, trombosis o deficiencia del flujo sanguíneo.

Para saber más

¿Quieres repasar las técnicas de hemostasia? Este vídeo te explica la actuación completa en caso de una hemorragia en el brazo. Aunque esté en portugués es muy didáctico, échale un vistazo.

En el vídeo se ve a un bombero portugués comentando la actuación en caso de hemorragia en un brazo. Después de una breve explicación se ve a un hombre caminando por una calle. Tiene una hemorragia en el brazo y otras dos personas acuden a socorrerle. Ambos llevan guantes y uno de ellos limpia la herida con suero de una botella. Inmediatamente presiona con gasas. Al empaparse las gasas no las retira sino que coloca otras encima. Manteniendo siempre el brazo elevado, hace un vendaje sobre las gasas para inmovilizarlas y mantener la presión. A continuación presiona fuertemente con los dedos en la parte interna del brazo del herido, aproximadamente a mitad del brazo presionando con fuerza suficiente como para comprimir la arteria humeral contra el hueso y reducir el flujo de sangre. El vídeo finaliza recordando la importancia de utilizar guantes para la protección de los auxiliadores.