¿Por qué se teme cuando se oye hablar de radiaciones? ¿Conoces el accidente de Chernobil? Ocurrió en 1986 y ha sido el accidente nuclear más grave de la historia. Miles de personas afectadas por el material radiactivo liberado han sufrido o sufrirán efectos en su salud.
4.6.- Lesiones por radiaciones.
Las lesiones por radiaciones se producen por radiaciones ionizantes caracterizadas por penetrar en los tejidos e ionizar sus componentes. Estas radiaciones son utilizadas en aplicaciones médicas (diagnóstico y tratamiento de enfermedades) e industriales.
La radiación ionizante es aquella radiación con energía suficiente para ionizar la materia, extrayendo los electrones de sus estados ligados al átomo. Puede provenir de sustancias radiactivas, que emiten dichas radiaciones de forma espontánea, ó de generadores artificiales, tales como los generadores de Rayos X y los aceleradores de partículas
¿En qué situaciones pueden ocurrir lesiones por radiación? Las lesiones por radiación, pueden ocurrir en:
- Exposiciones accidentales a altas dosis de radiación, en accidentes laborales o guerras.
- Pacientes con secuelas tras radiación terapéutica.
En una exposición accidental e intensa a radiaciones como puede ser en un accidente industrial, ¿qué efectos puede producir en nuestro organismo? Aunque se desconocen en su totalidad y no es correcto hablar de "quemadura". El daño que producen las radiaciones en nuestras células es a través de la alteración de su material genético.
Algunos de los efectos de las radiaciones son:
- Efectos sistémicos: síntomas gastrointestinales (anorexia, náuseas, vómitos o diarreas) y efectos de muerte celular (aplasia medular...).
- Efectos locales: se producen lesiones cutáneas parecidas a quemaduras, pero de mayor profundidad. La víctima presenta primero eritema, más tarde hay edema, prurito, dolor y descamación de la piel que puede progresar a ulceración. La actuación inicial en estas lesiones cutáneas consiste en aplicar los principios de las quemaduras.
Forma muy grave de lesión de la médula ósea en la que se pierden todas las células progenitoras y por lo tanto no hay producción ni de hematíes, ni de leucocitos ni de plaquetas.