1.2.3.- Otros tipos de tejido conjuntivo.

Aparte del tejido conjuntivo propiamente dicho, existen otros tejidos en los que las células se encuentran inmersas en una matriz extracelular. No obstante, tienen funciones muy especiales, que hacen que conformen por sí mismos tipos diferentes de tejido conectivo.
Vas a profundizar ahora uno por uno:

Se observa la estructura microscópica de la osteona, con las fibras concéntricas alrededor del conducto de Havers.

TEJIDO ÓSEO:

Su función es formar el principal tejido de soporte del cuerpo humano, con unas especiales características de rigidez y resistencia a compresión y a la tracción.
Este tejido tiene la propiedad de mineralizarse, incorporando sales cálcicas (hidroxiapatita), que van a contribuir a sus propiedades. En el caso del hueso, la reserva de calcio es reversible, y, por lo tanto, atendiendo a las necesidades plasmáticas de este elemento, se puede movilizar el mineral. Podemos decir por tanto, que el hueso se hace y se deshace continuamente. Esto explica también el proceso de remodelado óseo que debe darse en el crecimiento o en la reparación de una fractura.
Podemos encontrar también tejidos similares mineralizados en la dentina y en el esmalte dentario. Mientras que en el hueso, las células formadoras de matriz se denominan osteoblastos, en la dentina pasan a llamarse odontoblastos. En las zonas de resorción ósea encontraremos también los osteoclastos, que son células destructoras de hueso.
En el tejido óseo, la matriz y las fibras colágenas recibe el nombre especial de osteína, y  se encuentra perfectamente organizada en estructuras regulares alrededor de un canalículo (canal de Havers). A esta estructura funcional y estructural se le denomina osteona.

TEJIDO CARTILAGINOSO:

Los huesos largos crecen a partir de una zona de cartílago mediante un proceso que denominamos osificación endocondral. Las células propias del tejido cartilaginosos, los condroblastos, proliferan y producen las sustancias de la matriz que les rodean (colágeno, ácido hialurónico…). Tras mitosis sucesivas se transformaran en condrocitos (una posterior mineralización de estas estructuras dará lugar al hueso). El cartílago es avascular, es decir, no recibe aporte sanguíneo por sí mismo, sino a través de la capa protectora que le rodea: el pericondrio.

La característica especial de este tejido es que, siendo sólo relativamente sólido puesto que no está mineralizado como el hueso, es capaz de resistir potentes fuerzas de compresión. Eso explica por qué forma parte de las superficies articulares, que son zonas corporales sometidas a fuertes tensiones y fricción.
Entre los diferentes tipos de cartílago se encuentran el cartílago hialino de crecimiento y el de las articulaciones, el cartílago fibroso (en los meniscos) y el cartílago elástico (por ejemplo, el que puedes encontrar en tu pabellón auricular). El tejido cartilaginoso merece que le dediquemos dedicación especial en el apartado "Para saber más"

Imagen al microscopio de los adipocitos.

TEJIDO ADIPOSO:

El organismo humano dispone de un tejido específico para almacenar grasas, de forma que puedan ser reutilizadas en el momento en que un aporte energético a partir de este sustrato sea requerido, o como materia prima para la síntesis de determinados compuestos.
Los adipocitos son las células propias de este tipo de tejido, especializadas hasta tal punto que se han transformado en una vesícula gigante rellena de lípidos, con el núcleo arrinconado en un margen. Han perdido incluso la capacidad de multiplicarse. Ni siquiera son buenas secretoras de fibras de colágeno, y su principal tarea será acumular o movilizar los depósitos grasos.
El tejido adiposo es uno de los más abundantes del cuerpo humano. Su porcentaje varía entre ambos sexos, pero puede oscilar, en circunstancias normales entre el 15 y el 25% del peso corporal total.

Sistema de Havers es la unidad anatómica y funcional del tejido óseo. Está constituido por un canal de Havers, alrededor del cual se agrupan laminillas con lagunas que contienen células óseas, ya sean osteocitos u osteoblastos. Este sistema es característico del hueso compacto

Autoevaluación

Pregunta

¿Cuál de los siguientes tipos de tejido conjuntivo carece de vasos sanguíneos propios?

Respuestas

Tejido conjuntivo epitelial.

Tejido óseo.

Tejido conjuntivo laxo.

Tejido cartilaginoso.

Retroalimentación