A finales del siglo XIX, un científico español elaboró una teoría que explicaba cómo era tisular y celularmente el sistema nervioso. Esta teoría se llamó “doctrina de la neurona”, y su autor recibió en el año 1906 el Premio Nobel de Fisiología y Medicina. El sabio se llamaba Santiago Ramón y Cajal. Y es a él a quien debemos las bases de la comprensión de la estructura del tejido nervioso. Las células básicas del sistema nervioso son las neuronas.
Las células pueden alcanzar un alto grado de especialización, especialmente en los organismos pluricelulares. Dicha especialización o diferenciación es tal que, en el cuerpo humano, en algunos casos, dificulta la propia viabilidad de la célula aislada. En el sistema nervioso, y precisamente debido a su altísima especialización, las neuronas dependen para su supervivencia de las células de la glía. Estas células, también descubiertas por Ramón y Cajal, actúan como auténticas nodrizas de las neuronas, asegurando su aporte de nutrientes, regulando la producción de neurotransmisores por parte de las mismas, facilitando el impulso nervioso, fabricando mielina, aislándolas del resto de tejidos e incluso induciendo la reparación de los axones en ciertos casos. Existen muchos tipos de células gliales, pero las más abundantes son los astrocitos, oligodendrocitos y las células ependimarias.
También debido a su especialización, la mayoría de las neuronas han perdido incluso su capacidad mitótica y, por lo tanto, no pueden reproducirse (sólo unas pocas mantienen su capacidad de renovación o regeneración).
La mielina es una sustancia que envuelve y protege los axones de ciertas células nerviosas y cuya función principal es la de aumentar la velocidad de transmisión del impulso nervioso.
Santiago Ramón y Cajal fue un médico español, especializado en histología y anatomía patológica. Compartió el Premio Nobel de Medicina en 1906 con Camillo Golgi «en reconocimiento de su trabajo sobre la estructura del sistema nervioso». Fue pionero en la descripción de las diez sinapsis que componen a la retina.