1.3.1.- Sistema locomotor.

Dibujo a tinta china utilizada para ilustrar los músculos del cuerpo humano.

La locomoción es la capacidad que tenemos de trasladarnos de un lugar a otro. Seguro que te parece que es la función más evidente del sistema locomotor. Pero no debes olvidar que este aparato tiene otras funciones, no menos importantes:

  • Es casi siempre la parte ejecutora de la respuesta a estímulos en nuestra función de relación.
  • Protege a otros órganos, a menudo considerados “nobles”, como el cerebro, el corazón, los pulmones o el hígado.
  • Se encarga, en la médula roja de los huesos, de fabricar los elementos formes de la sangre. Es lo que denominamos hematopoyesis.
  • Supone la auténtica y más abundante reserva de calcio del organismo. A diferencia de otras estructuras calcificadas, en el hueso la reserva es movilizable de acuerdo a las necesidades.
  • Además de la locomoción propiamente dicha, el sistema locomotor se encarga también de cualquier tipo de movimiento, del soporte y del mantenimiento de la postura.

El aparato locomotor está formado por tres componentes: el sistema óseo, el sistema muscular y el sistema articular. En un sistema de palancas, equivaldrían a las palancas, las fuerzas de tracción y el punto de apoyo, respectivamente.

SISTEMA ÓSEO

En el cuerpo humano podemos contar hasta 206 huesos. Estos huesos no son todos iguales y, en un intento por clasificarlos, se ha recurrido a su forma. Así encontraremos:

  • Huesos planos: Están formados por dos láminas pegadas de tejido óseo compacto. Apenas tienen tejido óseo esponjoso. El mejor ejemplo que podemos encontrar es la escápula, pero también los huesos del cráneo: parietal, frontal, occipital, etc.
  • Huesos cortos: Todas las dimensiones del hueso son similares, lo que le confiere un aspecto redondeado o cuboide. Son huesos cortos los del carpo y los del tarso, así como los cuerpos vertebrales. En este tipo de huesos, el tejido esponjoso será una parte constituyente importante.
  • Huesos largos: Se observa el predominio claro de una dimensión sobre las otras. Es el caso del fémur, el húmero, el peroné… En estos huesos podemos observar diferentes partes:
    • Diáfisis: Es la zona más larga del hueso, formada por tejido óseo compacto, que en lenguaje popular habrás oído nombrar alguna vez como “la caña del hueso”. Y, como una caña, está hueca por dentro, sólo ocupada por una estructura grasa que llamamos médula ósea amarilla.
    • Epífisis: Son los extremos del hueso (se suelen utilizar los términos proximal y distal para identificar las epífisis más cercana y alejada del cuerpo, respectivamente), ocupados por médula ósea roja de tejido esponjoso, donde se produce la hematopoyesis que antes has estudiado en las funciones del aparato locomotor.
    • Metáfisis: Es la zona que une las epífisis a la diáfisis. Coincide con la zona de crecimiento, por donde crecen los huesos en longitud hasta el final de la pubertad.

SISTEMA MUSCULAR

Encargados, mediante su contracción, de ejercer las fuerzas de tracción que provocan el movimiento, los músculos del aparato locomotor están formados por tejido muscular estriado. Saltan de hueso a hueso, unidos a ellos mediante los tendones, para moverlos, pero algunos se unen a estructuras cutáneas (por ejemplo en el caso de los músculos de la mímica) para ocasionar la movilización de éstas.

SISTEMA ARTICULAR

Podemos clasificar las articulaciones en sinartrodias (sin movimiento), anfiartrodias (con poco movimiento) y diartrodias (se mueven en algún eje del espacio). En estas últimas encontramos los elementos articulares, que pueden ser: cápsula articular, líquido sinovial, meniscos, cartílago sinovial y ligamentos.

La hematopoyesis o hemopoyesis es el proceso de formación, desarrollo y maduración de los elementos figurados de la sangre a partir de un precursor celular común e indiferenciado conocido como célula madre hematopoyética multipotente, unidad formadora de clones, hemocitoblasto o stem cell.

el carpo es una parte del esqueleto de la extremidad superior que se encuentra en la muñeca.

El tarso es la parte posterior del pie situada entre los huesos de la pierna y los metatarsianos; comprende siete huesos, llamados en conjunto tarsianos, dispuestos en dos hileras, astrágalo y calcáneo en la primera, y escafoides (ahora llamado navicular), cuboides y las tres cuñas, en la segunda.

La médula ósea es el centro esponjoso del interior de los huesos en el que se producen las células sanguíneas.

Tipo de tejido óseo que forma una red de trabéculas óseas, dejando unos espacios que son ocupados por la médula ósea

Debes conocer

Antes de pasar de página, ha llegado el momento de que revises los principales huesos, músculos y tipos de articulaciones del cuerpo humano. En el enlace siguiente podrás encontrarlos de forma sencilla.