1.2.- Clasificación histológica de los tumores.

Imagen endoscópica de un pólipo en el sigma.

Es importante que conozcas la nomenclatura específica que se les da a los tumores, y que permite deducir rápidamente, salvo en algunas excepciones, de qué tipo de neoplasia estamos hablando.

Para empezar, es importante que sepas que los tumores tienen, histológicamente, dos componentes principales:

  • El parénquima, que es el conjunto de las células cancerosas que se hallan en mitosis sucesivas.
  • El estroma, que es el tejido de sostén en el que se asienta el cáncer, básicamente formado por matriz y fibras conjuntivas y los elementos de vascularización sanguínea y linfática.

La nomenclatura de los tumores hace referencia, básicamente, al parénquima que los forman. Veamos pues, como nombrarlos:

Neoplasias benignas:

En general, añadimos a la raíz que indica la localización o el tipo de tejido primario, el sufijo –oma. Así, tendremos, por ejemplo, el hepatoma que, si recuerdas lo que aprendiste en la unidad de trabajo referente a la terminología, significa neoplasia benigna de hígado.

  • Y como no hay regla sin excepción, conviene que conozcas ya que el seminoma, el melanoma y el teratoma, son procesos malignos del testículo, las células pigmentadas de la piel y el que está formado por diferentes tipos de tejidos, respectivamente.

Si hacemos referencia a tumoraciones benignas derivadas del tejido epitelial, la cosa se complica un poco… y aparecen nuevos términos como:

  • Adenoma: tumor benigno sobre células epiteliales glandulares.
  • Papiloma: tumor benigno que forma estructuras en forma de verruga.
  • Cistadenoma: tumor benigno en forma de quiste, con líquido o similares en su interior.
  • Pólipo: tumor benigno sobre un epitelio mucoso, que crece hacia la luz del mismo.

Neoplasias malignas:

Lo que en las neoplasias benignas resultaba en una terminación en –oma, si el proceso es maligno, el sufijo utilizado será –sarcoma, siempre precedido de la raíz que hace referencia a la localización.

Conjunto de términos o palabras propias utilizadas en una ciencia, técnica, o especialidad, o por un autor.

Reflexiona

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¿Qué significa el término condrosarcoma?

Las neoplasias malignas del tejido epitelial se denominan carcinomas, pero también la nomenclatura más compleja nos ofrece pistas para deducir su origen. Así pues, podemos hablar de:

  • Adenocarcinoma: tumor maligno sobre células glandulares.
  • Carcinoma escamoso o epidermoide: tumor maligno sobre epitelios estratificados. Suele añadirse el órgano sobre el que se asienta, por ejemplo, "carcinoma escamoso pulmonar".

Vamos a concretar más, viendo los ejemplos de la siguiente tabla.

Nomenclatura de los tumores, según el tejido originario
Tejido de origen Benigno Maligno
Epitelial de revestimiento -oma, papiloma. Carcinoma.
Epitelial glandular Adenoma. Adenocarcinoma.
Conjuntivo fibroso Fibroma. Fibrosarcoma.
Conjuntivo óseo Osteoma. Osteosarcoma.
Conjuntivo cartilaginoso Condroma. Condrosarcoma.
Conjuntivo adiposo Lipoma. Liposarcoma.
Muscular liso Leiomioma. Leiomiosarcoma.
Muscular estriado Rabdomioma. Rabdomiosarcoma.