Después de la sesión, Claudia se pasó el fin de semana consultando febrilmente sus viejos apuntes de fisiopatología.

Lo tenía fácil, ya que había discutido por teléfono con su novio, y esa tarde habían decidido no salir a dar una vuelta, a ver si se les pasaba el enfado… ¿Qué mejor cosa podía hacer que estudiar?

¡Ahí estaba! Su profesor lo había dejado muy claro.

Neoplasia es un término general que indica "nueva formación", pero sirve tanto para las formaciones benignas como para las malignas.

La palabra "cáncer" ya está incorporada a la lengua popular, no se trata de un tecnicismo, y hace referencia a las neoplasias malignas.

Cáncer… El horóscopo de Iván, su novio…

¡Qué fácil se despistaba! ¡Ahora se ponía a pensar en su novio…! Recordó que lleva en la cartera un símbolo en forma de cangrejo indicando su signo zodiacal.

"¿Cómo no había caído antes?" —Pensó Claudia.— "Es evidente, ¿no? Cuando utilizamos la palabra cáncer, en realidad estamos ilustrando simbólicamente el crecimiento infiltrante de las neoplasias malignas, como si se tratara de un cangrejo clavando sus pinzas en los tejidos. ¡Qué gráfico! Y las tenazas evocan la tortura que supone el sufrimiento que provoca la enfermedad…"

Consultó la etimología de la palabra y, por supuesto, tal como había deducido, la palabra cáncer proviene del latín, y significa cangrejo…

No pudo evitar coger el teléfono y marcar el número de Iván…