Caso práctico
Ramón llega a las 9 de la mañana a la clínica dental sin haber podido dormir demasiado. Ayer tuvo una jornada de trabajo duro. Trabajó de 9 a 1 y de 4 a 8 como ayudante del cirujano y no tuvo en cuenta la ergonomía en el trabajo, por lo que hoy se ha levantado con un dolor intenso en la columna. Durante el desayuno se ha tomado un antiinflamatorio y se ha propuesto seguir todas las normas para trabajar de forma ergonómica que le explicó su profesora del módulo de Exploración Bucodental y que practicaron durante todo el curso.
De hecho, hoy ha recordado que esta profesora era muy exigente con la ergonomía durante las clases prácticas. En todas las actividades de trabajo en el sillón había una evaluación de la ergonomía odontológica. En muchas ocasiones comentaba a los alumnos y alumnas que, en un futuro si no tenían en cuenta esa forma ergonómica de trabajar, se acordarían de su insistencia y se lamentarían cuando trabajaran incorrectamente y tuvieran a consecuencia de ello algún problema muscular.
Hoy Esther ha llegado a la clínica muy temprano y ya se ha cambiado de ropa cuando llega Ramón.
-Buenos días Esther.
-Buenos días Ramón que tal estás? Tienes cara de cansado.
-Estoy bien, pero hoy he dormido poco y me he levantado con un dolor importante en la zona cervical. Ayer estuve trabajando con una postura incorrecta y he tenido que tomar un antiinflamatorio. Ahora empieza a hacerme efecto y me encuentro un poco mejor. Esta mañana me he acordado de la profesora del módulo de Exploración Bucodental la cual daba muchísima importancia a la ergonomía. Insistía mucho en que tenemos que trabajar con una postura equilibrada de nuestro cuerpo.
-Tu profesora tenía razón. Trabaja con una postura equilibrada y no te volverá a ocurrir.
Ramón va al vestuario y se cambia de ropa.
-¿Miramos la agenda de hoy Esther?
-Hoy trabaja la ortodoncista. ¡Tenemos mucho trabajo! No hay ni un hueco.