1.- Radiodiagnóstico dental.

Caso práctico

Una odontóloga que trabaja en Dentoclínic, le está explicando a una paciente el tratamiento de ortodoncia que necesita.

María acude a la clínica para que la ortodoncista le explique el diagnóstico de su caso clínico y las posibilidades de tratamiento, una semana después de la primera visita.

La doctora le explica que tiene una maloclusión y que, para corregirla, debe seguir un tratamiento de ortodoncia fija aproximadamente entre un año y medio y dos años.

En el ordenador le muestra las pruebas radiográficas que le realizaron la semana anterior y le explica con los modelos de yeso su caso clínico y cómo irá evolucionando su anatomía a lo largo del tratamiento de ortodoncia.

María ya tiene ganas de empezar y la doctora le comenta que, si está de acuerdo, hoy mismo puede empezar el tratamiento.

Es un método que consiste en la colocación de una aparatología fija en los dientes. Normalmente es conocida como bráckets, que son los aparatos que van sujetos al diente, les ayuda a su colocación adecuada y a corregir maloclusiones que dificulte su funcionalidad.

Una radiografía es una impresión fotográfica de una imagen producida por la transmisión de los rayos X a través de un objeto. Su finalidad es la obtención de la máxima información posible para llegar a un diagnóstico correcto, por lo tanto, es muy importante que la radiografía tenga la máxima calidad posible. Esto solo se consigue cuando la persona que realiza la radiografía tiene la formación adecuada y realiza el procesado de la misma de forma correcta.

En radiología odontológica se utilizan fundamentalmente dos tipos de procedimientos radiográficos:

  • Radiografía intraoral.
  • Radiografía extraoral (ortopantomografía, telerradiografía, radiografía lateral de cráneo, radiografía posteroanterior de cráneo, etc.).

Las radiografías intraorales son elementos que registran la imagen de los dientes y los tejidos adyacentes al ser impresionados por los rayos X generados por un aparato emisor de rayos de poca potencia. Son muy útiles para el diagnóstico de patologías dentales y de otras estructuras de la cavidad oral.

Si el operador maneja de forma adecuada el equipo de radiología intraoral el riesgo de exposición para el mismo, para el paciente y el público en general es escaso.

Las radiografías extraorales son elementos que registran la imagen de los huesos y estructuras de la cara y/o cráneo al ser impresionadas por los rayos X generados por un aparato emisor de rayos. Sirven para complementar el diagnóstico en diferentes especialidades odontológicas, como por ejemplo, ortodoncia, cirugía, etc.

En este tipo de técnicas radiográficas, el riesgo de exposición es mayor, aunque la utilización de técnicas digitales minimiza los riesgos. Esto es debido a que son necesarios tiempos de exposición menores.