¿Recuerdas que todos los procedimientos disponibles para prevenir la salud oral incluyen componentes educativos?
Como en todos los procesos educativos, también en un programa sanitario, podemos distinguir las siguientes etapas:
- Identificación de los problemas y prioridades.
- Objetivos.
- Ejecución.
- Evaluación.
- Conclusiones.
El objetivo último es aumentar el nivel de salud de la comunidad, modificando los comportamientos de las personas. Para ello es necesario modificar los conocimientos y actitudes que sirven de vehículo para este cambio de comportamiento. Se pueden establecer objetivos intermedios:
- Hacer de la salud un valor básico de la comunidad. Es decir, considerar la salud como un objetivo de primera necesidad en los individuos.
- Modificar en sentido favorable las conductas negativas relacionadas con la salud.
- Promover conductas positivas relacionadas con la salud.
- Promover cambios ambientales que favorezcan los cambios conductuales. Es muy difícil pretender que los individuos cambien sus hábitos si no tienen un entorno físico, psicosocial y sociocultural adecuado . Este tipo de modificaciones exige implementar medidas legislativas.
- Capacitar a los individuos para que puedan participar en la toma de decisiones sobre la salud de su comunidad.
Para conseguir el cambio de comportamiento se pueden llevar a cabo:
- Acciones sobre el individuo.
- Acciones sobre el medio ambiente.
Se debe considerar también qué conductas son las que hay que modifica:
- Las que tienen relación con la promoción de la salud.
- Las que tienen relación con la restauración de la salud.
En principio el valor “salud” debería ocupar uno de los primeros puestos en la escala de valores de la población, pero los intereses y las decisiones individuales de cada uno de nosotros no son autónomas, sino que están condicionadas y orientadas continuamente por la sociedad, es decir, por nuestro medio ambiente social. Luego, el empeño de la EPS debe ser, sobre todo, un empeño sociocultural para la formación de comportamientos y reestructuración de valores.
Así pues, la EPS debe ayudar al individuo a tomar decisiones autónomas y responsables, aunque éste sea un objetivo difícil de alcanzar en una sociedad en la que la comunicación organizada tiende a imponer decisiones y comportamientos establecidos. Por ello, esta disciplina es un método de trabajo en la actividad de los educadores, padres y profesionales sanitarios que trata de implicar responsablemente al individuo y a la comunidad en la defensa de la salud.