Existen varias definiciones de Educación para la salud (EPS), si nos fijamos en la OMS, define la educación para la salud como una combinación de oportunidades de aprendizaje planificadas, sobre conocimientos, actitudes y habilidades, que facilita cambios voluntarios del comportamiento que conducen a una mejora de la salud.
En todas ellas se establece un objetivo común, la búsqueda de la modificación de los conocimientos, actitudes y comportamientos de los individuos componentes de la comunidad, en el sentido de lo que también ha dado en llamarse, una Salud Positiva.
En la definición de la Educación Sanitaria, a parte de la terminología clásica (acciones educativas y persuasivas dirigidas al individuo, grupo o comunidad), también se actúa sobre los factores externos medioambientales, para hacerlos favorables o al menos neutros a conductas o comportamientos de salud adecuados.
Todas las definiciones de educación para la salud existen aspectos comunes: la modificación en sentido favorable de los conocimientos, actitudes y comportamientos de salud de los individuos, grupos y colectividades.
Actualmente se define como la ciencia que informa, motiva y ayuda a la población a adoptar hábitos de vida saludables a la vez que defiende las modificaciones ambientales y contribuye a formar a los individuos y a la comunidad para que puedan ejercer un papel activo a través de sus representantes, en la planificación y las acciones de salud pública.
Evolución del concepto de Educación Sanitaria.
En una primera etapa se incluían las acciones educativas dirigidas al individuo para que se responsabilizase de su propia salud y modificara los hábitos insanos que hubiera adquirido.
A partir de los años 70 del siglo pasado los conceptos y objetivos sufrieron un cambio importante.
Se había demostrado ya que las conductas humanas dependen de factores internos, pero también de factores externos: ambientales y sociales.
Entonces se planteó como objetivo la modificación de estos factores externos en sentido favorable, con la finalidad de que los cambios de conducta pudiesen mantenerse.
Por último, con el desarrollo del concepto de salud comunitaria se incluyó entre las funciones de la educación sanitaria: el capacitar a los individuos, grupos y colectividades para que participen activamente en su salud a través de sus representantes elegidos democráticamente en la toma de decisiones políticas sobres la acciones y servicios de promoción y restauración de la salud que vayan a llevarse a cabo en su comunidad.