La pérdida de los dientes o edentulismo requiere de un cambio en los hábitos de masticación y esta discapacidad se intenta restaurar por medio de prótesis.
El empleo de prótesis puede influir decisivamente en la masticación inadecuada y en la pérdida de la sensibilidad en la cavidad bucal. Sin embargo, no siempre está relacionado el número de dientes con la eficacia de la masticación, ya que muchas personas, a pesar de tener todos sus dientes, no mastican apropiadamente y degluten trozos muy grandes de comida, por lo que esta circunstancia también influye en el estado nutricional del individuo, e incluso puede llegar a producir atragantamientos y asfixias por cuerpos extraños.
Algunas recomendaciones en el cuidado de las prótesis y ortodoncias.
- Las prótesis dentales acumulan placa bacteriana en diferentes grados, según el estado de conservación. Los depósitos blandos se pueden eliminar enjuagando la prótesis con agua y frotándolas con una gasa suave y cepillándolas. Esto se debe hacer después de cada comida y por la noche al quitarse la prótesis para dormir.
- Si la prótesis tiene elementos metálicos no se deben usar ácidos ni hipocloritos con el fin de evitar la corrosión.
- Cuando el paciente lleva una prótesis dental y va a ser llevado a cirugía o sometido a alguna prueba diagnóstica especial, se le deben retirar las prótesis removibles, al igual que cuando ingresa en estado de inconsciencia. Sin embargo, tan pronto como se pueda se debe volver a colocar la prótesis dental, para evitar que luego esta no encaje o cause molestias debido al prolongado tiempo sin tenerla puesta.
Sustancia que se utiliza como desinfectante, el más utilizado es el de sodio también conocido como lejía.