La maloclusión es una entidad difícil de definir ya que la percepción individual de lo que constituye, difiere mucho entre las distintas personas o culturas, e incluso entre los distintos profesionales del sector. Como resultado de esto, no existe un índice epidemiológico que sea muy aceptado, no obstante, vamos a estudiar el índice de maloclusiones de la OMS, que es bastante utilizado en epidemiología porque es sencillo, aunque su capacidad discriminatoria es muy baja.

Está indicado en estudios epidemiológicos en grandes grupos poblacionales y permite tener una idea general de la presencia de maloclusiones y de las necesidades básicas de tratamiento.

Para su medición se exploran todos los dientes, y los criterios para la puntuación son los siguientes:

• 0: Normal y sin anomalías.
• 1: Leve o con anomalías leves, como uno o más dientes girados, inclinados o con leve apiñamiento o espacio que interrumpen la alineación normal de los dientes.
• 2: Moderada o severa, con anomalías importantes, con una o más alteraciones en los incisivos anteriores, overjet maxilar de 9 mm o más, overjet mandibular, mordida cruzada anterior igual o mayor a la totalidad del diente, mordida abierta, desviación de la línea media mayor de 4 mm, apiñamientos o espacios superiores a 4 mm.