Caso práctico
En el laboratorio en el que están nuestros alumnos hay una persona responsable de los temas de seguridad. La coordinadora de prevención de riesgos trabaja para que todo esté bien señalizado y para que el personal del laboratorio se encuentre informado de los riesgos existentes. Carlos no recuerda ahora algunas de las señales que encuentra en el laboratorio.
—Susana, de repente me ha dado la impresión de que todo es peligroso en este laboratorio.
—¿Y eso?
—Pues porque todo está lleno de señales.
—No seas alarmista. Piensa que es algo que es un aviso.
—Ya, pero tendría que entender lo que me dicen las señales y no me acuerdo, en todas veo una señal de peligro y ya no me atrevo a tocar nada.
—Bueno, al menos no te lanzas a tocarlo sin pensarlo. Repasaremos los pictogramas de peligrosidad que son fundamentales y ya verás que todo irá mejor.
—Y el montón de normas también tenemos que repasarlas.
—Sentido común la mayoría de ellas. Muchas son lógicas cuando piensas en el laboratorio como un lugar de trabajo.
—Susana te veo muy puesta en el tema.
—Es que vi un accidente con una compañera por un despiste tonto y por eso no las olvido nunca.
—Venga pues, vamos rápido a hacer un repaso de los pictogramas y leamos las normas antes de terminar la mañana.
—Bueno, de momento quítate la bata anda.
—¡Pero si vamos a hacer un descansillo!
—Justo por eso, porque no se puede ir con la bata a la cafetería.