Caso práctico

Manos de técnico que están utilizando un frasco lavador para lavar preparaciones dispuestas en una cubeta de tinción.

Durante esta semana, Carlos, esta asignado a la sección de hemogramas. Está aprendiendo a utilizar los grandes equipos de recuento hematológico. Esta muy contento ya que cada día confían más en su trabajo y le permiten tener mayor autonomía.

Esta mañana le ha sorprendido el resultado mostrado por el contador hematológico para una de las muestras, ya que tenía un valor muy bajo de plaquetas. ¡Menos de 30.000 plaquetas por mm³! Ante la duda, decide consultar con Mónica, una de las técnicas del laboratorio.

Mónica, le explica que en algunas ocasiones, es necesario confirmar el resultado obtenido con el equipo automático mediante la observación al microscopio de la muestra de sangre. Por ejemplo, en este caso es posible que las plaquetas estén agregadas y el equipo no las cuente. Mónica le pide a Carlos que prepare una extensión de sangre, la tiña y la observe al microscopio a ver que le parece.

- ¡No hay problema! -Dice Carlos-. Creo que se me da bien realizar extensiones, además me encanta observar muestras de sangre con el microscopio…

- Estupendo -dice Mónica-. Pues como se te da bien, prepara también las extensiones de estas tres muestras. Tenemos que confirmar la presencia de blastos.

A pesar de los numerosos avances tecnológicos que se han incorporado al laboratorio, el estudio de la morfología de las células sanguíneas en una extensión sanguínea teñida con colorantes, sigue siendo uno de los estudios más importantes realizados en hematología.

Imagen de una extensión de sangre vista al microscopio donde se pueden observar algunos hematíes dispersos con forma de disco y coloreados de naranja y agregados de plaqueta constituidos por grupos de pequeños discos de color morado.

La extensión de sangre o frotis es una técnica ampliamente utilizada para la visualización microscópica de muestras de sangre periférica y de médula ósea. Para ello, la muestra tiene que extenderse sobre un portaobjetos, fijarse, teñirse con colorantes para, posteriormente analizarlo mediante microscopía óptica. Este tipo de estudios es uno de los más importantes que se realizan en los laboratorios de Hematología. Puede ver el procedimiento a seguir en el Anexo I.