Imagina que siembras en una placa una muestra procedente de un lugar estéril (por ejemplo LCR) y obtienes el resultado que se observa en la imagen.
- ¿Cuál de todas esas colonias obtenidas será la responsable de la infección en el paciente?
- Si solo una de ellas es la que está causando los síntomas, ¿De dónde proceden las otras?
- ¿Estaban también en la muestra (muy poco probable, era una muestra de un lugar estéril) o han acabado en el medio de cultivo por error?
Para evitar tener estos problemas que invalidarían el diagnóstico, en microbiología todas las manipulaciones debes realizarlas siguiendo los pasos de la Técnica Aséptica, cuyo objetivo es preservar la esterilidad de los medios de cultivos y la integridad de la muestra durante el procedimiento.
Todos los pasos de las técnicas microbiológicas se realizan cerca de un mechero Bunsen encendido ya que así se establece a su alrededor una zona estéril en la que se puede trabajar sin riesgo de que las muestras se contaminen. ¿Recuerdas la imagen del apartado anterior? La siembra se estaba realizando junto a un mechero encendido.
El equipo utilizado para sembrar es relativamente simple:
- Asa de siembra: Alambre de Nicrom o platino terminado en un bucle y con el otro extremo insertado en un mango cilíndrico. En el mercado hay disponibles asas desechables de plástico que se distribuyen estériles y también asas calibradas para contener 10 o 100 µl de inóculo. Estas asas calibradas son utilizadas en los recuentos ya que así se conoce el volumen de muestra que se ha sembrado.
- Hilo de siembra: Igual pero sin bucle al final., simplemente un alambre recto.
- Se pueden utilizar también hisopos o pipetas estériles.
Aleación de níquel y cromo. La aleación está compuesta de un 80% de níquel y un 20% de cromo. Es de color gris y resistente a la corrosión, con un punto de fusión cercano a los 1400 °C. Por su gran resistividad y su difícil oxidación a altas temperaturas es utilizada entre otros como componente del asa de siembra facilitando su esterilización.