Prácticamente todo el mundo ha sufrido de algún tipo de picadura o mordedura a lo largo de su vida. Un recurso típico para reducir el dolor era la aplicación de amoniaco en la zona de la picadura. ¿Crees que es un buen medio de atención a la picadura de una avispa?
Mordeduras:
La mayoría de las agresiones por mordeduras se producen en un entorno doméstico o rural. En su mayoría son lesiones que no entrañan demasiada gravedad aunque aproximadamente el 1 % de los casos han resultado mortales.
Las mordeduras de perros son las más habituales y en general afectan a la cabeza y cuello si la víctima es un niño o una niña, y a las extremidades superiores en caso de personas adultas. Las mordeduras humanas son escasas y en general superficiales. Suelen producirse en entornos infantiles.
La actuación en caso de mordeduras sería:
- Limpieza de la herida en profundidad utilizando agua y jabón o un suero fisiológico.
- Desinfección con povidona yodada.
- Las heridas punzantes, las lesiones en cabeza o cuello, las mordeduras en las manos y todas aquellas en las que se pueda sospechar una infección deben atenderse en los servicios médicos.
- Cuando existe riesgo de rabia la rápida limpieza con agua y jabón, e intenso riego con povidona yodada (betadine) consiguen evitar la aparición de la enfermedad hasta en el 90% de los casos.
Picaduras:
Las picaduras suponen la introducción en la piel de un apéndice de un animal y la inoculación de una sustancia tóxica en el organismo.
La mayoría de las picaduras son de carácter leve (mosquitos, avispas, medusas), sin embargo en ocasiones pueden suponer un mayor riesgo llegando en raros casos a poner en peligro la vida del herido.
Las picaduras de insectos como las avispas, abejas, abejorros, mosquitos, se tratan con limpieza de la piel y extracción del aguijón si lo hay. La irrigación de la zona con amoniaco reduce el dolor y la inflamación. En caso de las orugas podemos retirar los filamentos mediante una tira de esparadrapo antes de seguir las recomendaciones generales.
Las picaduras de serpientes se tratan con reposo y aplicación de frío local. Elevamos la extremidad afectada para reducir el edema. En estos casos nunca se realizarán incisiones ni succión de la zona afectada pues aumentamos el riesgo de infección. El tratamiento médico no debe demorarse, pues los síntomas pueden aparecer varias horas después.
Las picaduras de arácnidos en nuestra zona no son de extrema gravedad. El tratamiento consiste en la limpieza de la zona afectada y curas periódicas. El frío local reduce el dolor y el edema.