Como consecuencia de lo que hemos comentado en el apartado anterior hay ocasiones en que el dispositivo no sabe la MAC destino y para conseguir averiguarla envía un paquete a todos los dispositivos de la red (broadcast), si en la red tenemos conexiones entre switchs que formen un circuito cerrado puede suceder que la petición ARP esté dando vueltas y, muchas peticiones de este tipo pueden saturar la red, esto es lo que se denomina tormenta de broadcast.
Supongamos el siguiente esquema, el PC con IP 192.168.0.100 quiere acceder al PC con IP 192.168.0.200, en su tabla ARP no se encuentra una línea asociada a esta IP, desconoce su MAC. Y ahora supongamos que este PC 192.168.0.200 no se encuentra en la LAN, se emitirá una petición ARP de broadcast que se propagará por todos los switchs, cada switchs recibirá la petición y la reenviará por todos sus puertos.
Pero la petición de broadcast no encontrará respuesta y habrá conexiones en las que estará dando vueltas produciendo una tormenta de broadcast.
El origen de las tormentas de broadcast está en la redundancia de las rutas
Los switchs inundan con peticiones broadcast todas las interfaces o puertos, salvo la interface por donde llegó la trama de petición con la esperanza de que el destinatario desconocido se encuentre en alguno de los segmentos de red. Si no aparece se producen bucles en nuestra instalación, esto puede llevar a una "tormenta de broadcast".
Una forma de evitar estas tormentas es conectar los switchs de la red en estructura de árbol, donde en la zona troncal colocaríamos los switchs más rápidos.