Si la persona que hace la recopilación de tu información es un aprendiz de hacker, con tu dirección IP puede intentar una denegación de servicio, es decir, te envía un gran volumen de información que tu ordenador no es capaz de asimilar, por lo que no puedes navegar. La idea es como el niño pequeño que repite una y otra vez a su madre:
-¿Puedo ir? ¿Puedo ir? ¿Puedo ir? ¿Puedo ir? ...
En realidad para el niño no supone ningún esfuerzo repetir lo mismo muchas veces pero para la madre es una entrada continua de datos que recibe de su hijo que no le deja hacer otra cosa, más que contestar:
-No, no, no, no...
Pues el ataque DDOS es lo mismo. A tu ordenador le llega infinidad de datos desde la red y el contestar y administrar esta información le roba tiempo, tiempo que no puede dedicar a enviar la solicitud de página web que tú estás haciendo.
Ningún dispositivo, incluso los teléfonos móviles, puede sufrir un ataque por lo que es importante minimizar las posibilidades de que esto ocurra. En esta unidad y en la siguiente aprenderás que hay herramientas para proteger tu equipo.
Un ataque de denegación de servicio, también llamado ataque DoS (de las siglas en inglés Denial of Service), es un ataque a un sistema de computadoras o red que causa que un servicio o recurso sea inaccesible por ejemplo para ti como usuario legítimo. Normalmente provoca la pérdida de la conectividad de la red por el consumo del ancho de banda de la red de la víctima o sobrecarga de los recursos computacionales del sistema de la víctima.
Un ataque de DDoS, también llamado ataque DoS (de las siglas en inglés Denial of Service), es un ataque a un sistema de computadoras o red que causa que un servicio o recurso sea inaccesible por ejemplo para ti como usuario legítimo. Normalmente provoca la pérdida de la conectividad de la red por el consumo del ancho de banda de la red de la víctima o sobrecarga de los recursos computacionales del sistema de la víctima.