5.- Optimización de costes.
Caso práctico
En el almacén de Supermercados El Vergel tienen toda la información sobre los costes. La dirección propone unos objetivos de reducción de costes, en porcentajes variables para cada actividad (almacenaje, preparación de pedidos, entrada y salida de mercancías).
En el equipo de trabajo, estudian la posibilidad de incorporar más estanterías y sustituir las carretillas retráctiles alquiladas por carretillas de pasillo estrecho. A Miguel le corresponde “tomar medidas” para analizar, cuantas estanterías se podrán incorporar con el nuevo diseño de almacén.
La nueva estrategia de costes tiende a analizar cada una de las fases del proceso. Si puedes analizar los diversos conceptos de costes que se dan en el almacenaje, puedes ajustar cada uno de éstos, en lugar de fijar un coste global.
En la contabilidad tradicional la distribución de costes se basa en los siguientes conceptos:
- Costes de almacén: personal e instalaciones del almacén.
- Costes de transporte: facturas de transportistas.
- Costes de distribución: delegaciones y centros de distribución.
En este tipo de asignación no se distingue entre los costes de instalaciones, manipulación o picking asociándolos a los productos según su rotación. Para optimizar los costes logísticos, la nueva contabilidad distingue y relaciona cada actividad dentro del almacén y la vincula con los artículos por la rotación, o con los clientes según cómo realizan los pedidos y la forma de envío y distancia. De este modo, se pueden ajustar mejor los costes e incidir sobre ellos.
Es preciso tener en cuenta estas cuestiones especialmente en las siguientes situaciones:
- Cuando los costes logísticos suponen una cantidad importante en el conjunto de costes.
- Cuando la rentabilidad de la empresa es ajustada.
- Cuando se detecta diferencias altas de rentabilidad en algunos productos o clientes.
- Si se dispone de instrumentos de medida de la actividad logística que puedan imputar los costes por actividad a los productos o clientes.
Algunos principios de una adecuada estrategia de costes son:
- Planificar el coste total y particularizar posteriormente cada coste.
- Definir costes individualizados frente a costes medios.
- Definir el nivel de calidad del servicio que se quiere conseguir.
- Reducir al máximo los costes fijos.
- Dividir los costes en los distintos subconceptos y relaciones entre ellos.