Siguiendo con la clasificación anterior, verás otras dos configuraciones de las más comunes, como son RAID 5 y RAID 0 +1:
- RAID 5: En este caso, la información de distribuye por bloques. Cada disco contendrá un bloque redundante, de manera que si nos referimos a una línea como un conjunto que tienen un orden "n" en cada disco, en cada línea habrá un bloque redundante que va rotando de disco a disco haciendo un recorrido cíclico). En la siguiente imagen puedes comprobar este tipo de distribución: en la primera línea el bloque de paridad está en el disco 4, en la segunda línea en el disco 3, en la tercera en el disco 2 y así sucesivamente.
Este tipo de configuración requiere al menos tres discos para ser implementado. Como hemos dicho, proporciona tolerancia a fallos y en comparación con un RAID 1, tiene la ventaja de que aprovecha mejor la capacidad de almacenamiento. Su principal inconveniente, es que en el caso de fallar más de un disco, la información no se puede recuperar ya que el bloque de paridad necesita el resto de los discos para reconstruir la información.
- RAID 0+1: Esta configuración, también llamada RAID 01, se denomina de esta forma por ser una combinación entre un RAID 0 y un RAID 1. Como podrás comprobar en la siguiente imagen, en primer lugar se crea un conjunto RAID 0 y posteriormente, se crea un espejo (RAID 1) de ese conjunto.
El problema de esta configuración, es que al añadir un disco en uno de los RAID 0, estamos obligados a añadir otro en el conjunto replicado para mantener la configuración. Otro problema es que, en el caso de fallar en dos discos simultáneamente, no es posible de recuperar la información (a no ser que ambos discos sean del mismo conjunto RAID 0).