Caso Práctico
Julián es un empleado que trabaja en el departamento de Recursos Humanos de la empresa. Un día, haciendo una "limpieza" de ficheros que ya no necesitaba, borró por equivocación una carpeta que contenía una serie de documentos que había estado redactando en el último mes.
Aunque Julián no es ningún experto en informática, sabe que es posible restaurar ficheros que han sido mandados a la papelera de reciclaje, pero en este caso, los ha borrado con la combinación de teclas "shift + supr", con lo cual se pone en lo peor.
Aún así, su compañero Isaac, que está enterado del problema, trata de tranquilizarle:
-Tranquilo Julián, no está todo perdido. Yo tengo un amigo que perdió todas las fotos de su boda por un error similar y se puso en contacto con una empresa. Finalmente, después de pagar una cantidad bastante razonable, no me preguntes cómo, pero consiguieron recuperar las fotos.
-¿Es que existen empresas dedicadas a la recuperación de datos?
-Sí claro. Por eso, no des los datos por perdidos hasta haber agotado todas las posibles soluciones.
-Eso me deja más tranquilo, no obstante hablaré antes con Ignacio y Juan, a ver que me cuentan.
Un poco más aliviado, Julián decide llamar a Juan e Ignacio y comentarles lo que le ha pasado para ver si existe alguna posibilidad de recuperar los ficheros borrados.