¿Cuál es el primer paso para empezar a planificar?

El primer paso en la planificación de obras de construcción y montaje de redes e instalaciones de agua es identificar las actividades, que estructurarán la planificación del proyecto.

Esta etapa requiere una especial atención ya que descompone el alcance total del proyecto en tareas más sencillas y fáciles de gestionar. En adición a los requerimientos, es recomendable desarrollar un documento donde se establezca la descripción detallada del proyecto y en el cual se defina explícitamente lo que forma parte del proyecto, y lo que no forma parte de este.

La identificación de actividades no debe ser labor de una sola persona. Todos los involucrados en la ejecución del proyecto deben colaborar y contribuir. En este momento es muy importante la colaboración de los trabajadores con mayor  antigüedad, ya que su experiencia les proporciona una mayor casuística de situaciones a las que se han enfrentado y son capaces de anticipar problemas que se pueden dar en un futuro. Las actividades que no se hayan planificado no aparecerán en el plan de trabajo causando retrasos y sobrecostes posteriormente.

Subdividir el proyecto en actividades no es una tarea sencilla, requiere una minuciosa lectura de los planos y de los informes pertinentes, también es necesario entender bien los procesos constructivos, finalmente hay que ser capaz de agrupar las tareas de la obra en pequeños paquetes de trabajo,  medibles y abarcables.

La Estructura de desglose del trabajo o EDT (tambien conocida por sus siglas en ingles WSB), es una representación gráfica de la descomposición del alcance total del proyecto en partes más pequeñas, donde en cada nivel se subdivide el elemento del nivel superior en sus elementos componentes. La subdivisión se realiza hasta alcanzar el nivel de actividad de trabajo, es decir el nivel de paquetes de trabajo, que a su vez contendrán actividades y tareas,el cual es posible planificar y controlar como elemento. De ésta forma conseguimos asignar duraciones y recursos a las actividades y facilitar la atribución de responsabilidades. Aunque como vemos se podría seguir subdividiendo hasta el nivel de actividades, no conviene complicar la EDT, ya que eso complicaría la ejecución y el control. La EDT se deja hasta el nivel de responsabilidad de un encargado o de un trabajador.

Otra función de la EDT es establecer cuales componentes deben irse realizando para completar un entregable determinado hasta llegar a el proyecto como la suma de sus paquetes de trabajo. Debe notarse que la EDT no es una lista de actividades, más bien tiene una orientación a producir elementos tangibles en el proyecto, conocidos como entregables, tal como se ha mencionado.

Aunque en la unidad anterior hemos escogido el orden cronológico de ejecución como criterio para configurar la sucesión de actividades, la división de la obra puede responder a otros criterios. Si se estudia el plano de planta general de un proyecto, se verá la conveniencia de dividir la obra en secciones para su ejecución. Algunos de los motivos que influirán en la elección de las secciones pueden ser: la diferente ubicación de los tajos, el que se ejecuten con distinto equipo de construcción (subcontratas), que los operarios sean de especialidades diferentes y que deban ejecutarse en distintas épocas.

En un mismo proyecto hay muchas maneras de organizar la EDT, entre otras:

• Descomposición en partes físicas
• Descomposición por capítulos.
• Descomposición por oficios.
• Descomposición por contratos.

Dos personas diferentes nos darían dos ETD diferentes, pero lo importante es que quede cubierto el 100% del alcance de la obra.