Es de imaginar que durante toda la unidad estés pensando ¿Qué puedo hacer si veo que no voy cumpliendo con los plazos? ¿Cómo puedo solventar la situación?
Muchas veces en las obras nos encontramos con pequeños retrasos que son fáciles de gestionar, en otras ocasiones estas desviaciones empiezan a ser importantes y pueden producir incumplimientos en las fechas. En estas ocasiones es necesario recurrir a técnicas de aceleración o de compresión del cronograma.
El tiempo y el coste de un proyecto están intrínsecamente unidos, la variable coste responde a cualquier modificación de la variable tiempo. Si el proyecto se ve acelerado, como consecuencia el coste se incrementará. Cualquier actividad dentro de una obra de obras de construcción y montaje de redes e instalaciones de agua requiere personal, materiales, equipos o pagos a terceros (subcontratación), todo esto consume dinero y por tanto tiene un impacto económico en el proyecto . La relación entre coste y tiempo es una relación de compromiso, es decir, hay que buscar un equilibrio entre el coste a cambio de la reducción del tiempo de ejecución. En el sector de la construcción la aceleración puede llevarse a cabo a través de:
- añadir horas extraordinarias a la jornada laboral
- añadir jornadas laborales en días festivos
- añadir turnos de trabajo
- pagar un sobrecoste para acelerar una entrega de material
- instalar equipos de mayor capacidad (y más caros)
- subcontratar empresas más especializadas.
Coste marginal de aceleración
Cada actividad tiene su propio coste de aceleración. Se define como “coste marginal de aceleración” el coste de acelerar una actividad una unidad de tiempo (que pueden ser horas, días, semanas, etc). Cuanto más bajo es el coste marginal de una actividad, más económico resulta acelerarla.
Coste marginal=∆Coste/∆Tiempo
∆Coste= Coste acelerado-Coste normal
∆Tiempo= Tiempo normal-Tiempo acelerado
Vamos a analizar la técnica de acelerar o comprimir el cronograma, partiendo del concepto de coste marginal. En un proyecto compuesto por muchas actividades no es necesario acelerar todas para reducir el plazo, ya que la duración total del proyecto es la suma de las actividades críticas. Cuando queremos acelerar la ejecución de un proyecto, sólo hay que acelerar las actividades críticas, ya que éstas son las que determinan el plazo total de duración de la obra. Pero ¿es necesario reducir todas las actividades críticas? En función del tiempo que queramos acortar acelerar hemos una, algunas o todas las actividades. En primer lugar se debe acelerar las actividades de coste marginal más bajo ya que el ahorro de tiempo resulta más económico que en cualquier otra actividad, es decir, comenzaremos por las actividades más baratas de acelerar. Pero hay que tener en cuenta que a medida que acortamos la duración de algunas actividades, la ruta crítica puede trasladarse a otras actividades. Por tanto el proceso de aceleración o compresión del cronograma podemos resumirlo en los siguientes puntos:
- identificar la ruta crítica y las actividades críticas.
- Calcular el coste marginal de cada una de las actividades críticas.
- Seleccionar la actividad de la ruta crítica con el coste de aceleración más bajo, es decir, con el coste marginal más bajo.
- Acelerar la actividad escogida, lo máximo posible.
- Verificar que la trayectoria de la ruta crítica no ha cambiado, en caso contrario, repetir el proceso con la nueva ruta crítica
