1.- Estilos de liderazgo.
Caso práctico
María está analizando cómo ejerce la dirección su hermano con los empleados.
Según ha podido comprobar, su estilo parece estar más orientado al democrático aunque también ha podido comprobar que tiene rasgos de persuasivo. Y le consulta:
—¿Pedro te importaría que asistiera a tu próxima reunión con los conductores y conductoras, esa que tienes los viernes al medio día? —pregunta María a su hermano.
—No, claro que no, además la de esta semana promete, llevamos dos incidencias importantes que comentaremos el viernes, será muy activa y seguro que muy participativa.
—Estoy muy interesada en ver como lideras el grupo, la verdad es que tu equipo siempre se muestra muy entusiasmado y se palpa el buen ambiente que tenéis.
—Pues el viernes te espero al media día —le dice su hermano.
A la hora de hablar de coordinación del equipo de conductores y conductoras y en definitiva de una empresa de transporte de viajeros, es inevitable hablar de liderazgo.
El líder es el que coordina y dirige la misión de los miembros de una empresa y ahora vamos a estudiar esta figura. En primer lugar conozcamos el término líder.
La etimología de la palabra inglesa “lead” o “leader”, líder en castellano, muestra varias acepciones: dirigente, cabeza, guiar, conducir o jefe.
El liderazgo es el poder o autoridad sobre otra u otras personas para enfocar sus ánimos y pretensiones hacia el logro de una meta.
Pero un líder no es cualquier dirigente que asuma, ejecuta el poder y consiga sus objetivos, para ser un líder, hay además que contar con ciertos atributos. ¿Quieres conocerlos?
Las características o atributos que definen al líder son:
- Disfruta con su trabajo, se identifica con él y con la empresa, personalizando los valores que lo caracterizan.
- Tiene confianza en sí mismo y en su grupo. Genera y transmite confianza.
- Es inquieto y está en continuo proceso de aprendizaje. Conoce las nuevas tecnologías y se interesa por la formación de sus subordinados.
- Se preocupa por el futuro y trata de anticiparse a él.
- Es flexible y tolerante. Se adapta a los cambios. Y aboga por la renovación.
- Elige a sus colaboradores y sabe dirigirlos y valorarlos potenciándoles sus habilidades.
- Fomenta y sabe aprovechar el potencial de sus trabajadores.
- Delega proporcionando autoridad y compartiendo responsabilidades.
¿Por qué en las empresas actuales se hace necesaria la figura del líder?
El jefe o jefa, o el director o directora general de una empresa, es una persona que da órdenes y controla a sus subordinados para que realicen el trabajo que ha decidido que hay que hacer, en el orden que él también ha decidido y como él ha decidido. Sin embargo, esta figura ha tenido que ir adaptándose y ha cambiado. Hoy día, un jefe o jefa ha de ser un líder, alguien que guía, motiva y se involucra en la formación de su equipo.
La empresa ha cambiado, la globalización, los contratos temporales, las nuevas tecnologías, Internet, etcétera, han hecho que en cierta manera las condiciones laborales sean en muchas ocasiones precarias. Y con estas condiciones conseguir que los trabajadores de una empresa se involucren, estén motivados y persigan los objetivos de la empresa es difícil. Esta labor se consigue con más éxito, si el dirigente en lugar de ser el director o el jefe de antaño, es un líder.
De aquí, surge la necesidad de la existencia en la empresa de personas que superen la imagen de un jefe tradicional, dedicado a organizar tareas y a vigilar su cumplimiento, convirtiéndose en un jefe-líder capaz de motivar a su equipo, formarlo, potenciando su creatividad y consiguiendo su implicación en el logro de los objetivos de la empresa.
En una empresa de transporte de viajeros pueden existir distintos tipos de liderazgo, el autoritario, el democrático, el permisivo, el burocrático, el paternalista o el carismático. ¿Quieres conocerlos? Los veremos en los siguientes apartados de la unidad.