En cambio, el mantenimiento correctivo, de emergencia, o bajo demanda, se realiza como resultado de un problema observado o de la recepción de una queja específica. Requiere una acción inmediata para resolver la emergencia. Además de conseguir la resolución de la incidencia, es importante que la información resultante del mantenimiento correctivo sea utilizada en el establecimiento de los programas de mejora del servicio, estableciendo las medidas preventivas oportunas, para reducir así en el futuro el número de emergencias.
De manera general, los objetivos que se pretende alcanzar a través de la correcta ejecución del mantenimiento preventivo en las redes de abastecimiento y saneamiento son:
- Fiabilidad, la instalación en su conjunto y sus elementos en particular van a operar en mejores condiciones de seguridad, ya que su estado y condiciones de funcionamiento van a ser conocidos en todo momento.
- Disminución de tiempos muertos o tiempos de parada. En la medida en que tengamos nuestras redes revisadas, controladas y plenamente operativas, los indeseados cortes parciales de suministro y la inhabilitación de sectores de la red por avería serán reducidos considerablemente.
- Mayor duración de los equipos e instalaciones. A través de un mantenimiento periódico alargamos considerablemente la vida útil de todos los elementos de la red.
- Uniformidad en la carga de trabajo para el personal de Mantenimiento debido a una programación de actividades. El personal no trabaja a demanda, sino que tiene un organigrama pautado en el que se recogen tanto actuaciones de reparación de urgencia como revisiones rutinarias de mantenimiento.
- Menor costo de las reparaciones. En la medida en que las tuberías y sus accesorios son revisados periódicamente y puestos a punto, el número y la gravedad de las averías decrece de manera sustancial.