De lo expuesto anteriormente puede deducirse que el servicio de directorio es importante en sí mismo, pero es fundamental para aglutinar información que puede ser fuente de objeto para desplegar nuevos servicios basados en la cooperación entre las distintas aplicaciones y el servicio de directorio.
Así, el servicio de directorio puede actuar como servidor de autenticación, proporcionando el servicio de contraseña única. Además puede contener información necesaria para que los distintos servidores puedan decidir si un usuario puede acceder a determinada información.
Puedes utilizar el servicio de directorio como repositorio en el cual almacenar la información que varios servidores deben compartir, por ejemplo: la configuración, información sobre el control de acceso, etc.
Además, el directorio proporciona un protocolo estándar para gestionar toda la información contenida en él evitando la necesidad de desarrollar dicho protocolo.
Otra utilidad que puede resultar interesante es la de emplear el servicio de directorio para indexar la documentación almacenada en el servidor Web, con la precisión que otras herramientas no pueden generar.
Debido a XML, los documentos contarán con metainformación, es decir, información sobre la información que contienen, lo cual hará más fácil y eficaz la labor de indexación de los contenidos del servidor Web. Aquí es donde el servicio de directorio puede jugar un papel importante, ya que proporciona un acceso uniforme a la información contenida en él.
Esta última puede ser una de las mayores utilidades de los directorios, ya que permiten separar la operación de localización de la información del servidor que la contiene.