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1.- Introducción.

Caso práctico

María se ha puesto manos a la obra para realizar la gestión de costes. Cuenta con la ayuda de Carlos y Julia, además van a tener unas grandes aportaciones de Antonio ya que tiene el grado de Empresariales, además de estar estudiando el ciclo formativo de transporte y logística.

Recientemente han comprado cinco vehículos cisterna para la empresa, pero contablemente hablando les surge la duda de si considerarlo un coste o un gasto, y ¿cuándo será un pago?

Estas dudas serán resueltas a lo largo de este apartado.

Joven de unos 27 años que trabaja en prácticas en L&T revisa unos documentos.
Responsable de comercialización. Mujer con pelo corto y gafas, sentada en una mesa de oficina escribiendo algo.
Una hucha de dinero.

En estos momentos tienes una visión más concreta de la prestación del servicio de transporte, tal y como has estudiado en la unidad anterior, pero ¿es fácil llevar a cabo dicha actividad? Lógicamente no, cada actividad empresarial, sea de la índole que sea, conlleva una toma de decisiones que es necesario realizar para llevar a cabo dos objetivos importantes para una empresa:

  1. Lograr una rentabilidad económica.
  2. Intentar satisfacer a la clientela.

Para llegar a conseguir esos dos objetivos principales que suponen la piedra angular de cualquier actividad empresarial, hay que definir unas estrategias empresariales y plasmarlas en acciones concretas.

Pues bien, en la prestación del servicio de transporte terrestre, que es el que nos ocupa, la empresa tiene que realizar un análisis de sus costes de explotación para tomar decisiones, ¿costes de explotación? Se definen a continuación.

Los costes de explotación son todos aquellos que se derivan de la operación y que no están contemplados como costes de ventas, serán la parte correspondiente de gastos de funcionamiento del negocio: alquileres, suministros, vehículos, amortizaciones, etc.

¿Por qué se hace necesario realizar un análisis de costes? Las empresas, y especialmente las empresas del sector de transporte terrestre, están en un entorno cada vez más competitivo, de tal forma que necesitan disponer de varias variables para establecer una tarifa adecuada en el servicio que prestan.

Sí, el precio de venta es el que se fija para un producto tangible, por ejemplo, el precio de venta de un vehículo, o el precio de venta de un armario, etc. Pero en la prestación de los servicios hablamos de “tarifas”. Seguramente hayas oído hablar de ¿Cuál es la tarifa del servicio del abogado? ¿Cuál es la tarifa del notario? ¿Conocemos las tarifas de las agencias de transporte? Ahora hablamos de prestaciones de servicios. Es fundamental que te quede claro esta distinción.

Cualquier empresa de transporte tiene que fijar unos precios de los transportes que los clientes les encarguen. Esto no sólo es obligatorio para las empresas de transporte por carretera, sino también para el transporte marítimo, aéreo o ferrocarril, ya sea de pasajeros o de mercancías.

En definitiva es el montante que se paga por el servicio prestado.

Reflexiona

¿Crees que las empresas de transporte tienen fijado un precio por la Administración Pública?

No obstante, a pesar de gozar de esa libertad para establecer las tarifas que crean oportunas, la necesidad de garantizar la prestación de determinados servicios en condiciones adecuadas hace que se prevea la posibilidad de que la Administración competente en materia de transportes pueda establecer tarifas, las cuales podrán ser: