A la hora de establecer una estrategia, la empresa también debe plantearse por dónde puede crecer en un futuro más o menos próximo. En relación con los momentos de establecimiento y desarrollo de la empresa, veremos las siguientes estrategias:
- La estrategia de concentración.
Cuando se inicia un proyecto, puede optarse por la estrategia de la concentración, que consiste en ofrecer un solo producto para especializarse en el mismo. Se puede ir más allá especializándose también en un segmento de mercado.
-
La estrategia de diversificación.
Esta estrategia consiste en:
- comercializar nuevos productos, junto con los que ya vendía la empresa y/o
- introducirse en nuevos mercados.
Normalmente, una empresa se decide por la diversificación o entrada en negocios nuevos cuando el mercado al que tradicionalmente se dirigía está saturado.Se puede diversificar de diferentes maneras:
-
Flickr / hslo (CC BY-SA)
La diversificación horizontal: consiste en producir y/o vender nuevos productos en mercados similares a los tradicionales de la empresa y empleando una tecnología análoga.EJEMPLO:
Los Donuts comenzaron siendo de dos variedades: glaseado y de chocolate. Posteriormente, se han ampliado las modalidades de la famosa rosquilla (chocolate blanco, fresa, rayado, etc.)
-
La diversificación vertical: consiste en la producción y venta de productos relacionados con el ciclo de explotación de la empresa. De este manera, la empresa se convierte en su propio proveedor o cliente iniciando actividades que antes cubrían terceros ajenos a la compañía.
EJEMPLO:
Un fabricante de automóviles empieza a producir amortiguadores, frenos, etc.
Esta estrategia requiere el desarrollo de competencias, habilidades o conocimientos nuevos por parte de la empresa.
-
La internacionalización.
Representa el desarrollo de la actividad económica de la empresa en otros países. La finalidad de esta estrategia es ampliar los mercados y alargar el ciclo de vida acudiendo a mercados exteriores.