
La primera clasificación que vamos a estudiar es la que divide a las cooperativas en cooperativas de primer grado y cooperativas de segundo y ulterior grado. Las primeras, que son las más frecuentes, también se subdividen en otros tipos que veremos a continuación
- Cooperativas de primer grado formadas por tres socios o socias como mínimo que pueden ser personas físicas o jurídicas (una sociedad, un ayuntamiento...) Pueden ser de muchos tipos, hemos destacado los siguientes:
- Cooperativas de trabajo asociado. El objetivo de los cooperativistas es crear sus propios puestos de trabajo
- Cooperativas de consumidores y usuarios. Por ejemplo un gimnasio utilizado por los y las cooperativistas.
- Cooperativas de viviendas. Personas que se asocian para construir sus viviendas.
- Cooperativas agrarias. Los productores se asocian para la utilización de maquinaria o venta común de sus productos.
- Cooperativas de servicios. Por ejemplo, una cooperativa que distribuye medicamentos a los farmacéuticos locales.
- Cooperativas de transportistas. Los taxistas suelen agruparte utilizando esta forma jurídica.
- Cooperativas de seguros. Aseguran a los cooperativistas ante determinadas eventualidades.
- Cooperativas sanitarias. Aseguran a sus miembros riesgos relacionados con la salud.
- Cooperativas de crédito. Muchas cajas de ahorro son cooperativas.
- Cooperativas de enseñanza. Posibilitan el acceso de los jóvenes al conocimiento práctico de técnicas de organización empresarial fomentando la cultura emprendedora.
- Cooperativas de Segundo o Ulterior grado, formadas por varias cooperativas. Por ejemplo, varias cooperativas agrícolas crean una cooperativa de segundo grado para la exportación de sus productos.