Las características de los interruptores automáticos son las siguientes:
- Intensidad nominal o calibre: se define como la intensidad máxima que el interruptor automático es capaz de soportar sin que produzca la apertura del circuito. Sobrepasado este valor el dispositivo cortará el circuito en un tiempo determinado. Los calibres normalizados son los siguientes:
6, 10, 16, 20, 25, 32, 40, 50, 63, 80, 100 y 125 A
- Poder de corte: indica la intensidad máxima que es capaz de cortar el interruprtor automático, expresada en kA. A diferencia de los fusibles, cuya ventaja principal es precisamente su elevado poder de corte, los interruptores automátivos poseen un poder de corte muy inferior a los otros, siendo éstos del orden de 4,5 kA, 6 kA, 10 kA y 20 kA. Debido a esto, todas las instalaciones interiores de baja tensión antes de conectarse a la línea de distribución deben disponer de un fusible, el cual realizará el corte de la línea para intensidades de cortocircuito elevadas producidas en la instalación interior.
- Curvas: determinan los tiempos de corte en función de la intensidad que circula por el dispositivo. A diferencia de los fusibles, no expresan la intensidad que puede circular a través de él, sino la intensidad que circula en función del calibre automático expresado como I/In.