Caso práctico
Tras repasar más detenidamente los planos. Lorenzo empieza a revisar los particulares de cada cuadro y se percata de que son muy distintos unos de otros, pero que hay menos de los que se contabilizan en el presupuesto.
- No entiendo muy bien una cosa, tengo aquí varios planos de los cuadros, pero hay bastantes menos que los que aparecen en el presupuesto ¿faltan planos? -pregunta Lorenzo.
- No. Si te fijas bien, algunos planos de los cuadros eléctricos hacen referencia a varios números. Eso quiere decir que varios cuadros son exactamente iguales. Lo hemos decidido así para facilitar la instalación y reducir costes, porque ya sabes que cuando más se pide de una misma cosa, mejor es el precio. - Explica Carlos.
- Lo que me habías comentado antes del precio exponencial, ¿a qué te referías?
- En general los cuadros eléctricos son todos iguales. Necesitan cumplir con la normativa y contar con unos magnetotérmicos y diferenciales específicos para cada circuito, para cada actividad. Si la actividad es común, como las luces, que consumen poco, pues los materiales convencionales son suficientes para una adecuada protección. En cambio, cuando nos vamos alejando de esas funciones comunes, y metemos motores, de mayor potencia y más necesidad de intensidad, hay que utilizar unos materiales mejores y por ende más caros. Además se fabrican menos, por lo que son un producto más exclusivo y evidentemente de mayor coste.- Expone Marisol.
- Ya veo, así es por ello que los cuadros que más se suelen repetir son los más baratos, sobre todo en el caso de la nave industrial y las oficinas.