ELEMENTOS DE LA COMUNICACIÓN
Ya que acabamos de comprobar que la comunicación es, efectivamente, un proceso, vamos a estudiar ahora cuáles son los agentes y elementos que integran este proceso. Un esquema simple nos ayudará a fijar ideas:
Es decir, el proceso comunicativo se desarrolla de la siguiente forma:
- Nace de un agente denominado EMISOR. Hablando de comunicación humana, el emisor es la persona que manda el mensaje. En algunas ocasiones particulares puede existir un emisor múltiple (piensa en algún caso) aunque no suele ser lo más normal. El emisor genera y codifica el mensaje. Como iremos desarrollando posteriormente, en esa codificación no se encuentra sólo la información, sino que aparecen otros elementos de carácter afectivo.
- Por el contrario, el RECEPTOR es la persona o personas a las que les llega el mensaje del emisor. En este caso es muy frecuente que los receptores sean más de uno, fácilmente miles o millones a través de los medios de comunicación de masas. El receptor decodifica el mensaje y lo interpreta. ¿Interpretará lo que quiere el emisor que interprete?
- El MENSAJE es el conjunto de informaciones objetivas y afectivas que transmite el Emisor.
- El CANAL es el camino o medio que permite que el mensaje llegue del emisor al receptor. Muchos autores consideran que el canal es el medio físico de transmisión. Otros lo consideran como un conjunto de medios físicos y de interacción entre emisor y receptor que da lugar a distinguir entre canal personal e impersonal como veremos después.
- El CÓDIGO es el conjunto de normas y protocolos en los que se codifica el mensaje. Para que el proceso de la comunicación sea efectivo, emisor y receptor deben conocer el mismo código. Piensa en una persona que se dirige a ti en una lengua desconocida, te puede decir lo que estime oportuno. Él emite su mensaje, emplea correctamente el canal (te llega el sonido) pero desconoces su código. No has interpretado el mensaje.
A estos dos agentes y tres elementos de la comunicación, se les unen otros tres que también tienen su importancia:
- El RUIDO es la perturbación que sufre la señal en el proceso comunicativo. Se puede dar en cualquiera de sus elementos, son las distorsiones del sonido en la conversación, o la distorsión de la imagen de la televisión, por ejemplo.
- El CONTEXTO es la situación en la que se produce la comunicación. Evita ambigüedades y malos entendidos. En el contexto influyen cuestiones de situación física (del lugar en el que se establece la comunicación), psicológicas, sentimentales, culturales, etc.
- La RETROALIMENTACIÓN es la capacidad del receptor para reaccionar ante le recepción de un mensaje. No siempre puede llegarle al emisor. Una cuña radiofónica sí puede provocar agrado o desagrado, pero no existe mecanismo de retroalimentación, esto es, es un canal impersonal. Una entrevista, en la que la retroalimentación es continua, es un ejemplo de canal personal.
ETAPAS DE LA COMUNICACIÓN
Una vez que hemos definido los elementos que intervienen en la comunicación, vamos a fijarnos en las etapas que se desarrollan al realizar una comunicación.
- La primera etapa es la codificación. En ella, el emisor decide el código en el que va a enviar el mensaje y lo codifica. Lo normal es que sea algo tan simple como empezar a hablar o a escribir aunque a veces puede no ser tan automático. Por ejemplo, ante un auditorio en el que hay personas que no conocen la lengua del emisor, podría utilizarse también otro idioma para codificar el mensaje.
- La segunda etapa corresponde a la transmisión. En esta etapa, el mensaje codificado por el emisor recorre el canal escogido. Algunas veces el canal lo elegimos nosotros entre varios posibles. Un gesto en vez de un mensaje oral. Una llamada telefónica en lugar de una carta. Una cuña radiofónica publicitaria (anuncio en la radio), frente a una campaña de buzoneo. La elección incorrecta del canal muchas veces trunca el que la comunicación llegue eficazmente al receptor o a los receptores que queramos. También puede ocurrir que, aunque el mensaje llegue, el receptor se sienta molesto por el canal escogido. Imagina que hemos hecho unas mejoras en las redes de abastecimiento de agua y como control de la satisfacción del cliente queremos hacerle una encuesta. Decidimos visitar a los clientes en su casa para que nos facilite sus opiniones con la mayor comodidad. Sin embargo los hay que no están en casa y además a algunos clientes no les gusta la invasión de su intimidad para algo que consideran ajeno. En vista de esto, decidimos mejor realizar las encuestas telefónicamente. Pero otro grupo de clientes no acaban las encuestas porque no les gusta estar más de tres minutos al aparato. Pues las mandamos por correo electrónico. Pero los hay que no tienen o no lo facilitan y otros no mandarán la encuesta. Cada tipo de receptor, en cada momento o circunstancia puede preferir un canal de comunicación u otro. Acertar con la elección facilita la comunicación, pero equivocarse por completo la hace inútil.
- La tercera etapa es la de recepción. El mensaje por su canal llega al receptor. La cuestión es si llega en condiciones o en la recepción sufre una pérdida de información. Esta etapa suele ser la más sensible al ruido. Por ejemplo, en un mensaje oral en la calle en el que deja de percibirse una parte porque pasa un ruidoso camión. O porque el móvil pierde cobertura y dejamos de oír un trozo del mensaje. Sin embargo, el ruido también puede estar presente en la codificación (en el ejemplo del orador que se dirige en dos lenguas, puede tener alguna dificultad en la traducción) y en la emisión (a veces vemos a los presentadores de TV pedir que les bajen el retorno porque el eco de su propio mensaje les distrae y les impide hilar su discurso con normalidad).
- La cuarta etapa es la decodificación del mensaje por parte del receptor. Aparentemente sencillo. Le ha llegado la información, conoce el código común con el emisor y recibe la información. Pero aquí está la "trampa". La comunicación en la mayor parte de los casos, no es sólo información. El mensaje del emisor contiene unas intenciones afectivas que acompañan la mera información. Lograr que el receptor las interprete correctamente según quiere el emisor es igual de importante que la propia información. Esta cuestión, de vital importancia en el plano empresarial, comercial y docente, se abordará más adelante de forma detenida.
- La última etapa es la retroalimentación (si existe) de la comprensión del mensaje por parte del receptor, haciéndoselo saber al emisor. Por su vital importancia en la comunicación interpersonal, nos referiremos a ella en posteriormente
El emisor es uno de los conceptos de la comunicación, de la teoría de la comunicación y del proceso de información que emite o envía el mensaje a través de un canal hasta un receptor, perceptor y/u observador
Receptor, en teoría de la comunicación, es el agente que recibe el mensaje, señal o código emitido por un emisor, transmisor o enunciante; es el destinatario que recibe la información.
El mensaje es, en el sentido más general, el objeto de la comunicación. Está definido como la información o enunciado verbal que el emisor envía al receptor a través de un canal de comunicación o medio de comunicación determinado
Un canal es el medio de transmisión por el que viajan las señales portadoras de información entre emisor y receptor, que emite a un referente. Normalmente el canal es el aire en la transmisión oral y el papel en la escrita. Es frecuente identificarlo también como canal de datos.
En la comunicación, el código es el lenguaje con que se comunica el vagabundo y el fumador. El emisor y el receptor deben utilizar el mismo código para que la comunicación sea posible
Cualquier cosa que interfiera la llegada del mensaje que un emisor transmite a un receptor se puede considerar como ruido.
En Comunicación, el Contexto es el conjunto de circunstancias en las cuales se produce la Comunicación (lugar y tiempo, cultura del Emisor y el Receptor, etc.)
La retroalimentación es un fenómeno de la comunicación. Se podría definir como aquella información de vuelta en una comunicación efectiva. En todo proceso de comunicación hay dos elementos protagonistas: un emisor y un receptor. Entre ambos se produce una retroalimentación cuando el receptor responde al emisor.
La Codificación: La Codificación consiste en que el Emisor convierte el mensaje en signos que puedan ser recibidos y entendidos por el receptor.
La comunicación requiere la transmisión de información de manera intencional. Esta transmisión se realiza por medio de signos.
El proceso de recepción que se lleva a cabo es el inverso al del emisor, procesando e interpretando los signos elegidos por el emisor, es decir: realiza la decodificación del mensaje. El receptor capta la información ya enviada por un emisor.
La Decodificación consiste en que el Receptor convierte los signos que le llegan en un mensaje. De esta forma los signos son asociados a las ideas que el Emisor trató de comunicar.