Cuando se empleen taludes más acentuados que el adecuado a las características del terreno se dispondrá una entibación que ofrezca absoluta seguridad. La elección del tipo de entibación se hará de acuerdo a las características del terreno y la profundidad de la zanja (tabla 1). Los tres tipos que vamos a ver son; entibación cuajada, semicuajada y ligera.
Tipo de terreno | Solicitación | Profundidad del corte (m) | |||
---|---|---|---|---|---|
<1,30 | 1,30-2,00 | 2,00-2,50 | >2,50 | ||
Coherente | Sin solicitación | No necesaria | Ligera | Semicuajada | Cuajada |
Solicitación de vial | Ligera | Semicuajada | Cuajada | Cuajada | |
Solicitación de cimentación | Cuajada | Cuajada | Cuajada | Cuajada | |
Suelto | Indistintamente | Cuajada | Cuajada | Cuajada | Cuajada |
Tabla 1 – Elección de tipo de entibación
La diferencia entre los distintos tipos de entibaciones es la proporción de terreno a excavar que queda cubierta con el material de entibación. Si las paredes de terreno quedan totalmente cubiertas será cuajada, si se cubre el 50% será semicuajada y si la proporción es menor que el 50% ligera.
Hasta hace unos años el material más utilizado para entibaciones eran tablas de madera, pero hoy en día prácticamente han desaparecido. Los métodos más utilizados actualmente son los cajones de entibación y planchas o guías deslizantes.
Los cajones de entibación presentan la particularidad de que se montan en el exterior de la zanja y se introducen en el interior de la zanja durante la excavación mediante hinca o inmediatamente después de la excavación. Son habituales hasta profundidades de 4 m. A partir de esa profundidad pueden presentar problemas en su extracción debido a los empujes del terreno además de que las excavadoras más comunes trabajan cómodamente hasta esa profundidad. Profundidades superiores requieren maquinaria más potente o brazos extensibles.